El Ayuntamiento de Barcelona prevé construir 4.500 viviendas de alquiler protegido a través de la sociedad mixta Habitatge Metròpolis Barcelona. El gerente de Vivienda del Ayuntamiento, Javier Burón, ha explicado que la licitación para buscar un socio privado saldrá este mes, que se podrán presentar ofertas durante 5 o 6 semanas y que a principios de marzo se hará el proceso de adjudicación. Burón ha dicho que la sociedad, que actualmente es pública y está constituida al 50% por la AMB y el Ayuntamiento de Barcelona, estará "completamente constituida" en el primer trimestre de 2019 y que las "operaciones reales" comenzarán a partir del segundo trimestre. Según el calendario del Ayuntamiento, las primeras viviendas estarán disponibles a partir de 2022. Burón ha explicado que el socio privado deberá tener una "capacidad económica importante". La primera aportación de capital del operador privado será de 12 MEUR. La AMB y el Ayuntamiento de Barcelona aportarán 6 MEUR cada uno. La aportación de capital en las siguientes fases será según la oferta que haya hecho la empresa ganadora.
Por su parte, el concejal de Vivienda y Rehabilitación del Ayuntamiento, Josep Maria Montaner, ha dicho que la sociedad público-privada es fruto de haber "asumido que no toda la vivienda se puede hacer desde la gestión pública" y de la necesidad de que sea a "escala metropolitana". "Es un paso más para que la cuestión de la vivienda sea afrontada coordinadamente a través de los diversos municipios que forman parte del área metropolitana", ha dicho.
Los grupos aplazan al plenario el nuevo paso de la sociedad
Para que se abra el proceso para buscar un socio privado, la cuestión debe pasar por comisión y por el plenario del Ayuntamiento de Barcelona. La decisión se ha aplazado al plenario del 21 de diciembre, después de que todos los grupos, excepto BComú y el concejal no adscrito Juanjo Puigcorbé, hayan hecho reserva de voto.
A pesar de la reserva de voto, el concejal de Vivienda ha confiado en que en el plenario votarán a favor. Burón ha recordado que es la tercera vez que el expediente pasa por el plenario y ha remarcado que "nada apunta a que grupos que han tenido una posición determinada dos veces ahora tengan una diferente".