El alcalde de Tarragona, Josep Fèlix Ballesteros, ha admitido este jueves que no le gustaría que "nadie fuera a prisión", pero que "es evidente" que se debe respetar la justicia, "que decidirá lo que se debe hacer". "Seguro que no será una buena noticia", ha reconocido el alcalde, que ha explicado que sigue la actualidad "con mucha preocupación" después de que la Fiscalía haya pedido prisión para los consejeros destituidos. "En todo caso, después de esto habrá políticos encarcelados, si es que se produce, que espero que no, y no presos políticos", ha defendido Ballesteros, que ha dicho que "en este país no hay presos políticos". "Hay democracia y separación de poderes, presos políticos no hay porque si no no estaríamos en Europa". "Sé que se pueden hacer juegos de palabras y son legítimos, pero yo no los haré", ha dicho.
Ballesteros ha apuntado que si hubiera presos políticos, España no estaría en la Unión Europea, "como ha pasado con Turquía". Sobre la destitución de los delegados del Gobierno, Ballesteros ha apuntado que lamenta la destitución del delegado en Tarragona, Òscar Peris, pero que "esto es consecuencia de la DUI y la aplicación del 155", dos escenarios que Ballesteros había rechazado. "Se han cometido demasiados errores y espero que a partir del 21 de diciembre empecemos a reflexionar si estamos haciendo bien o no al conjunto del país". Precisamente sobre los comicios, el socialista ha apuntado que será necesario mucho diálogo, tanto antes como después de las elecciones, donde "la gente se expresará libre y democráticamente.