El juzgado de instrucción número 3 de Reus ha archivado la causa contra Jordi Perelló, el mecánico de Reus que se negó a reparar el coche de una agente de la policía española a finales de enero de 2018. En el auto, el juez menciona la resolución del TSJC de junio del año pasado que concluía que este tipo delictivo solo protege a los colectivos vulnerables y no a los cuerpos policiales. En este caso concreto, el magistrado justifica que, "con independencia de la intolerancia y la hostilidad" del mecánico contra la policía, "no existen elementos que permitan incluir sus manifestaciones en las características propias del delito de odio". Además, subraya que las expresiones no han tenido ninguna repercusión en cuanto a la incitación, un elemento necesario de este tipo delictivo.