Hoy jueves ya tenemos los resultados finales después del recuento de las municipales en El Vendrell y me gustaría hacer unas cuantas consideraciones. De entrada, debemos partir de la base de los resultados obtenidos: PSC (8), Som Poble – ERC (6), Ciudadanos (2), Junts Pel Vendrell (2), Primarias (1), Podemos (1) y AVP o la "novia sin ideología que todos quieren" (1).
En primer lugar, hay que decir que las posibilidades de formar gobierno son amplias aunque entiendo que la idea inicial debe ser buscar 11. Obviamente, todas las posibles mayorías pasan por contar con el PSC y Som Poble-ERC, por separado, ya que si forman gobierno juntos alguien puede quemar el Ayuntamiento. Siguiendo la campaña veo un más que posible acuerdo entre el PSC y Junts pel Vendrell con otro actor más como, por ejemplo, AVP. Este acuerdo, ya explorado desde el final de la legislatura pasada, da mayoría y garantiza un gobierno estable, partiendo de las compensaciones en Consejos Comarcales y Diputaciones, hasta la sentencia del Procés. A todo este entramado ayuda el hecho de que el PSC no tiene líneas rojas en política municipal, ha desaparecido la extrema derecha del consistorio, porque es un partido que prioriza la gestión municipal en su cultura política. Así, incluso, podría dibujar un acuerdo de gobierno estable con Ciudadanos ya que no han cerrado la puerta totalmente. Sin embargo, esta apuesta no la veo del todo clara. Para terminar, veo muy complicado que llegue a pactar con Podemos ya que estos ya lo tenían casi con Som Poble - ERC y, de hecho, estuvieron a punto de hacer candidatura conjunta.
En segundo lugar, en el pueblo se habla mucho de un gobierno independentista con Som Poble – ERC, Junts Pel Vendrell, Primarias y AVP. Este gobierno no sumaría 11, es lo que buscará Primarias, pero tiene algunos graves problemas. ¿Cómo explicaría Som Poble, después de su campaña, que ha pactado con algunos de los que hundieron el Vendrell? Si quieren tirar por este camino, como mínimo, creo que deberían forzar la renuncia de su cabeza de lista con la que tuvieron graves tensiones la pasada legislatura. De hecho, ya le costaron mucho de entender, aparte de su electorado, las conversaciones en la pseudo-moción de censura que se le planteó a Martí Carnicer. Este pacto, a mí me chocaría por la banda de Som Poble pero no por la de ERC. En definitiva, encuentro que la clave también estará en las conversaciones internas de la candidatura conjunta entre ellos dos. También, hay que ver qué dice la dirección nacional de Junts Pel Vendrell porque, con los resultados que han sacado y las sentencias del Procés después del verano, Eva no tiene las manos libres. Sinceramente, no me gustaría estar en su piel ya que ella tampoco tiene una relación fluida con Som Poble. Creo que Podemos no participaría activamente en este posible gobierno. A mí me costaría entenderlo así como que facilitara una investidura.
En tercer lugar, podemos tener diferentes gobiernos con mayorías simples jugando con las abstenciones pero creo que estas ideas se plantearán hechos los primeros contactos. De hecho, no sería mala idea algún gobierno en minoría si no fuera porque la sentencia del Procés, que desgraciadamente será dura e injusta, puede hacer saltar por los aires la política municipal. Ahora bien, como federalista, tengo muy claro que nos equivocamos si situamos el Procés en el centro de la acción política municipal.
En cuarto lugar, me gustaría hacer una reflexión a nivel nacional de lo que le ha pasado a los comunes salvo algunos bastiones de resistencia como El Prat de Llobregat. En algunos casos, no en el Vendrell donde sólo hay Podemos y Òscar Blasco and company han hecho una gestión más o menos correcta en líneas generales, no se puede obligar al electorado a resolver un jeroglífico cuando tiene que ir a votar. Esto ha pasado en Vilanova i la Geltrú donde se ha dado una imagen de desorganización de quien aspira a gestionar la cosa pública. A todo esto, debemos añadir la dinámica positiva del PSC al cual algunos de los ideólogos de la cosa común daban por muerto hasta hace dos telenoticias. Finalmente, lo podemos aderezar con el papel errático del espacio durante el procés. En resumen, ¡menos citar a Gramsci y más hacerle caso!. Así que, compañeras y compañeros que os habéis currado la campaña más complicada de vuestras vidas, tenéis todo mi respeto ya que demasiado habéis conseguido. Era materialmente imposible que los resultados fueran mejores de lo que han sido. Sin embargo, no os equivoquéis, ¡las responsabilidades donde corresponde!.
Alex Duque Triviño
Politólogo