El Ayuntamiento de Vilafranca, mediante la empresa contratada para el control de plagas en la ciudad, está realizando actuaciones en el arbolado contra la oruga procesionaria. Este insecto fija sus nidos en forma de bolsa en ejemplares de pino y de cedro desde donde baja por el tronco hasta llegar a tierra para enterrarse y seguir su ciclo vital. Las orugas forman largas hileras y, si se tocan, son muy urticantes tanto para personas como para animales de compañía.
El tratamiento preventivo en los pinos y cedros de la Villa se lleva a cabo cada año en otoño y este año pasado se realizó en el mes de octubre. No obstante, las condiciones ambientales actuales han favorecido un incremento puntual de la presencia de esta plaga.
Estos días desde el Ayuntamiento se están repasando los ejemplares de pinos y cedros de la Villa, se retiran todas las bolsas que se encuentran y se instalan anillas de captura de orugas para que las orugas no lleguen a tierra. Se priorizan sobre todo zonas céntricas, entornos escolares y espacios de paso o estancia.
Se pide a la población que no toque ni se acerque a las orugas, sobre todo las personas que sean alérgicas. Los perros deben ir atados y con morrión en las zonas donde haya pinos o cedros para evitar que se acerquen a estos insectos.