La transformación del sur de Reus continúa en el debate público. Uno de los temas más espinosos de esta metamorfosis y el que ha creado más reboot es la ubicación de la futura estación de buses. La oposición al nuevo emplazamiento ha animado a un sector de los vecinos a organizarse bajo la Plataforma en Defensa de Mas Iglesias, constituida ya oficialmente. Tras días de protestas, han hecho llegar una propuesta alternativa al equipo de gobierno reusense.
La plataforma plantea en este documento una ubicación situada al sur del Campus Bellissens y un gran parque fotovoltaico. La estación estaría al otro lado de las vías del tren -como la universidad- y la sitúan en un espacio de 18.600 metros cuadrados. Más que los 7.000 de la actual estación y de los 12.000 de la propuesta del consistorio. Con todo, se tratan de terrenos ahora mismo privados, que están previstos como zonas verdes de un futuro crecimiento urbanístico y que quedarían adyacentes a los edificios de este planeamiento.
Pérgola fotovoltaica y 20.000 m² de parking
Asimismo, la propuesta no se queda sólo en una alternativa para la estación. Por un lado, proyectan una pérgola fotovoltaica en toda la calle Bernat Torroja, que iría desde la Biblioteca Pere Anguera hasta la entrada del mismo parque. Allí piden también la plantación de algunos árboles más.
Por otro lado, ponen sobre el mapa un parking disuasivo de 20.000 m², donde aparcar vehículos de personas que se desplacen en autobús, tren o el futuro tranvía. Los terrenos estarían también tocando en la vía del tren, pero más próximos a la T-11. Tanto este parking, como la estación y el corredor tendrían instaladas placas solares en los techos. Una iniciativa que, según apuntan, podría utilizarse para alimentar autobuses urbanos eléctricos en la misma estación.
Según fuentes consultadas, este nuevo modelo para la estación podría retrasar la transformación del concejo y entrar en conflicto con el futuro puente que conectará los barrios del sur.