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La concejala de Promoción Cultural del Ayuntamiento de Igualada, Carme Riera, acompañada de la directora del Museo de la Piel de Igualada y Comarcal de L’Anoia, Glòria Escala, ha presentado este domingo el proyecto de transformación de la adobería museal de Cal Granotes. Este es un espacio museizado abierto en el año 1990 que ahora cerrará sus puertas durante unos meses para transformarse en un espacio que explique la historia de la piel en Igualada, del barrio del Rec, el proceso de adobar la piel y el oficio de adobero de forma inmersiva, vivencial y totalmente accesible.
Riera ha explicado que este es el resultado de un proceso madurado “que apuesta por abrir aún más el museo en el barrio del Rec y a la ciudadanía apostando por un museo moderno, accesible y que permita al visitante conocer la relación de la piel e Igualada, su evolución, su presente y también su futuro”.
Rehabilitación sostenible y accesible del edificio
Cal Granotes es una antigua adobería, una construcción industrial del siglo XVII, que forma parte del Museo de la Piel de Igualada y muestra la transformación de pieles crudas en cuero: el abono de la piel. La antigua adobería conserva las dos plantas características de estos establecimientos: la ribera y el tendedero.
El Ayuntamiento de Igualada hará una rehabilitación sostenible del edificio con el objetivo de mejorar su eficiencia energética, actualizar los cierres actuales y adecuar los espacios mejorando los acabados interiores. La adobería es un edificio protegido y forma parte del patrimonio histórico de la ciudad. En este sentido, las intervenciones propuestas son el resultado de un estudio del edificio, en el que se analizó el comportamiento energético del edificio a través de un modelo 3D y se propusieron una serie de medidas a adoptar en base al diagnóstico obtenido.
Las actuaciones se prolongarán hasta el primer trimestre de 2025 e incluyen la mejora del aislamiento térmico de las cubiertas, la estanquidad de las carpinterías interiores, la adecuación de la instalación de climatización y ventilación y la mejora de las condiciones de humedad interior en planta baja, así como la restauración de los paramentos interiores actualmente afectados por la filtración de humedad desde el subsol.
Este proyecto se añade a la actuación ya ejecutada de renovación del ascensor accesible. Esta rehabilitación está totalmente financiada por fondos europeos Next Generation dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia con un presupuesto de 252.890,00 euros.
Apuesta por una musealización más inmersiva, moderna y multirelado
Glòria Escala, directora del Museo ha sido la encargada de presentar la propuesta para la futura museografía que respetará la zona arqueológica industrial de los hoyos y una parte de la anterior museografía y que ha sido elaborado conjuntamente con la empresa Stoa.
Escala ha detallado que será una museografía mucho más accesible, con especial atención para las personas con diversidad funcional y sensorial creando un espacio inmersivo, más vivencial y que, al mismo tiempo se abrirá a explicar nuevos relatos.
Escala ha detallado que hasta ahora el museo se centraba únicamente en el proceso de abono de las pieles “ahora se ampliará al contexto del barrio industrial del Rec y su relación con la ciudad, la vida laboral y social de los trabajadores, el argot del oficio y de sostenibilidad y economía circular” entre otros.
Adobar es en sí mismo un oficio de reciclaje, ya que da salida y revaloriza un elemento “sobrante” de la industria cárnica.
El nuevo espacio museizado tendrá también dos audiovisuales que pondrán en contexto al visitante a la vez que le mostrarán imágenes actuales de la industria en nuestra casa. Estas piezas tendrán una voz en off, femenina, que será la personificación del agua, un elemento esencial en el proceso de abono de la piel.
A lo largo del recorrido 8 paneles explicativos con un código QR donde el visitante encontrará contenidos adicionales alojados en una web. Estos contenidos serán accesibles para todo el que quiera acceder a esta web, tanto durante la visita como antes o después, apostando por un acceso libre al conocimiento, por la pre y la postvisita.
El nuevo espacio museizado es fruto de un proceso participativo iniciado en enero de 2020 con la gente del barrio, con los diferentes agentes del Cluster, el CECI y los catedráticos en historia Pere Pasqual y Josep M. Torras i Ribé.
La digitalización del museo y la transformación del espacio de Cal Granotes son financiadas por fondos europeos Next Generation dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia con un presupuesto de 420.304,99 euros.
