Los vecinos de Vila-seca estaban en tensión con la presencia de un ladrón que utilizaba la violencia para conseguir materializar los robos. Después de tres episodios en menos de un mes, los Mossos d’Esquadra lo detuvieron ayer poco después de las 11 horas en la calle Jacint Verdaguer de Vila-seca.
El primer robo tuvo lugar el pasado 30 de diciembre cerca de las 16:45 horas en la avenida Verge de Montserrat. El ladrón de 45 años robó a la trabajadora de un establecimiento amenazándola con un tornasol y llevándose todo el dinero.
El ladrón utilizó un tornavoz y un cuchillo para amenazar a los empleados
Poco después, el 10 de enero, volvió a actuar en la calle de Anselm Clavé a plena luz del día. El arrestado entró en otro establecimiento y amenazó a la dependienta con un tornavoz y se volvió a llevar todo el dinero de la caja.
Finalmente, el último robo se produjo este miércoles a las 17:35 horas. El ladrón eligió un local de la avenida Ramón de Olzina y volvió a amenazar a los empleados, en este caso con un cuchillo.
Los Mossos detuvieron al ladrón en la calle Jacint Verdaguer de Vila-seca
Con las pruebas y el modus operandi empleado en los robos, los Mossos iniciaron su búsqueda. Las descripciones de las víctimas también ayudaron a identificar y detener al hombre de 45 años ayer a las 11:15 horas en la calle Jacint Verdaguer de Vila-seca.
En estos momentos, está previsto el arrestado pase a disposición judicial en las próximas horas. Por suerte, los agentes de la autoridad han puesto fin a la oleada de robos violentos que ha sacudido el municipio este último mes, con tres establecimientos que han experimentado un episodio para olvidar.