El Juzgado de lo Mercantil núm. 1 de Tarragona ha perdonado a una mujer una deuda que ascendía hasta 1,3 millones de euros que acumuló durante la crisis económica que afectó de lleno al país desde el año 2008.
El pasado 12 de marzo, según explica el abogado Nilo Hierro, de Nueva Abogados, en ‘La Ciudad’, el juzgado envió el auto por el que M.L.M., ha quedado exonerada de “la totalidad de las deudas insatisfechas”, gracias a la Ley de Segunda Oportunidad, con diferentes acreedores, entre ellos empresas como el BBVA, Caixabank, Cofidis, Cetelem y el Banco Santander.
“Se exoneran la totalidad de las deudas insatisfechas, tanto las que se reseñan a continuación como cualquier crédito nacido con anterioridad a la declaración del concurso que, por cualquier razón, no apareciera en la relación facilitada por el deudor y recogida en este auto, excepto los créditos excluidos a los que se refiere el artículo 489 del Texto refundido de la Ley Concursal”.
Con este auto, el juzgado requiere a los acreedores que comuniquen la exoneración a los sistemas de información crediticia a los que hubieran informado sobre la situación de la mujer, en relación con impagos o deudas pendientes, para que puedan actualizar sus registros y la mujer quede finalmente libre de cualquier deuda.
Deudas acumuladas por la crisis inmobiliaria
El infierno de esta mujer de 65 años y jubilada comenzó en el año 2008. Su marido, que administraba una empresa del sector de la construcción con más de 25 trabajadores, comenzó a tener problemas económicos debido a los impagos —que ascendían a unos 300.000 euros— de un constructor en una promoción inmobiliaria de lujo en la ciudad de Tarragona.
Los impagos obligaron a la empresa de quien era su marido a pedir diferentes créditos para poder hacer frente a la situación en plena crisis económica, teniendo que avalar ambos personalmente la mayoría de estos créditos.
El marido, a quien la situación económica afectó también en el ámbito personal, murió años atrás, razón por la cual la mujer se vio en la situación de hacer frente al endeudamiento con diferentes empresas financieras sola.
A consecuencia de ello, durante estos años ha perdido todas sus propiedades, que estaban altamente hipotecadas, y luego solicitó judicialmente la cancelación de sus deudas amparándose en la Ley de Segunda Oportunidad, ya que su situación económica no le permitía seguir haciendo frente a sus obligaciones financieras.
La Ley de Segunda Oportunidad
Esta ley es un mecanismo legal que permite que aquellas personas físicas o autónomos que hayan perdido su patrimonio puedan quedar libres de las deudas pendientes o que se les establezca un mecanismo de pagos de acuerdo con su situación económica actual.
Para estos casos, uno de los requisitos para acceder a este mecanismo legal es que el solicitante muestre de forma convincente que su situación económica no sea fruto de acciones fraudulentas o negligentes y que la persona haya asumido responsablemente sus deudas, pero que su situación económica no le permita ponerse al día.
Desde Nueva Abogados aseguran que llevan multitud de procedimientos de deudas de personas físicas, empresarias y no empresarias, y que están especializados en la Ley de la Segunda Oportunidad y situaciones de insolvencia con un éxito del 100% de los casos que han presentado ante el juzgado.
