Agentes de la Policía de la Generalitat – Mossos d’Esquadra de la Unidad de Investigación de Tarragona detuvieron este lunes a una mujer de 30 años, como presunta autora de los delitos de hurto y estafa.
El caso se abrió a finales de julio cuando agentes de investigación detectaron que una mujer había vendido una serie de joyas con inscripciones que no correspondían con sus iniciales.
Los investigadores tiraron del hilo y pudieron localizar a los familiares del propietario de las joyas.
Estos manifestaron que no conocían de nada a la mujer que había realizado las transacciones en el establecimiento de compraventa.
En este sentido, los Mossosvimos que la mujer trabajaba hacía seis meses en un bar de Tarragona y había estado allí donde había conocido al nonagenario.
Ganándose su confianza, se ofreció para ayudarle en tareas domésticas dado que la víctima sufría un elevado grado de discapacidad física.
Una vez establecieron una relación de amistad, la detenida aprovechó los momentos que se encontraba en el domicilio de la víctima para robarle joyas y hacer reintegros en cajeros.
Por todo ello, agentes de la Unidad de Investigación de Tarragona detuvieron a la autora del hurto y también le atribuyeron un delito de estafa por haber engañado al establecimiento de compraventa manifestando que las joyas eran de su propiedad.
Los Mossos d’Esquadrpudieron recuperar parte del botín el cual ha sido devuelto a su legítimo propietario.
La investigación continúa abierta y no se descartan nuevas detenciones.
