Unas 600 personas participaron en la Fiesta de la Miel que el Ayuntamiento organizó este domingo, 20 de octubre, en la Casa de las Abejas, en el parque del Mas Ratés. Antes, el viernes 18 de octubre, el Ayuntamiento, con el apoyo de la entidad Bee Happy, la Diputación de Barcelona y la Red de Ciudades y Pueblos hacia la Sostenibilidad, organizó el acto Sembrando Futuro: Jornada técnica sobre polución y agricultura, en el que se inscribieron 54 personas.
En el parque del Mas Ratés, adultos y niños disfrutaron de talleres y actividades gratuitas como el Apicirc, un espacio de circo interactivo y familiar de juego teatral y experimentación sensorial, hicieron bolsitas de olores con recortes de tela y plantas aromáticas, prepararon productos de cosmética con miel, pintaron murales y disfrutaron de una cata de mieles., entre otras actividades. La alcaldesa Olga Morales disfrutó de la fiesta, participando en las actividades y subrayó la importancia que tienen las abejas como polaco y productoras de cera y miel: “En la Casa de las Abejas se hace una importante labor educativa, dando a conocer, sobre todo a nuestros escolares, el importante papel que tienen estos insectos en la naturaleza. Es un ejemplo claro de por qué Viladecans es una ciudad educadora y de cómo creemos y protegemos el medio ambiente”.
El viernes, en el encuentro Sembrando Futuro: Jornada técnica sobre polillas y agricultura, la teniente de alcalde de Medio Ambiente y Sostenibilidad, Encarna García, también había puesto en valor la labor que realiza Viladecans con las abejas: “Llevamos diez años trabajando en un proyecto de defensa de los polacos, que son un elemento muy importante para garantizar la salud y la vida de las personas”.
A lo largo de toda la jornada se realizaron ponencias que trataron aspectos vinculados con el tema, como los insectos polacos, la necesidad de fortalecer su protección y la restauración de hábitats en entornos y paisajes agrícolas, y también se explicaron proyectos y experiencias relacionadas. Los polacos y otros insectos beneficiosos tienen una relación crucial con la agricultura: aseguran la fecundación y protección de los cultivos, mientras que la agricultura les proporciona hábitats y recursos para su supervivencia.
Iniciativa Bee Happy para estudiar la calidad ambiental
Viladecans utiliza las abejas para cuidar el medio ambiente. Dispone de colmenas en la ciudad para estudiar, vigilar y mejorar la calidad ambiental de la ciudad gracias a las abejas. Las abejas son buenos indicadores para estudiar el impacto de la contaminación en la ciudad, ya que, a través del polen, la cera y la miel, se puede detectar la presencia de elementos contaminantes como metales o plaguicidas: así se mide la contaminación de forma integrada, en lugar de los métodos tradicionales que miden la contaminación en un punto y en un momento. Y es por ello que Viladecans utiliza las abejas a través de la iniciativa Bee Happy Viladecans, que fue presentada en el Smart City Expo World Congress de 2016.
Desde entonces, los técnicos municipales trabajan conjuntamente con la Universidad Autónoma de Barcelona para saber qué aspectos del entorno determinan la calidad del polen. Las abejas fomentan la biodiversidad polenizando el 75 % de flores silvestres y el 40 % de los árboles frutales del mundo. Pero se encuentran en riesgo de reducción de su especie por causas diversas, entre ellas el cambio climático. Esto supone un riesgo para la humanidad, ya que si hay menos flores hay menos semillas y menos alimentos.