El Pleno municipal de Viladecans de septiembre, celebrado ayer, aprobó la modificación inicial de las ordenanzas fiscales para el año 2025, con el voto favorable de los grupos del equipo de gobierno, PSC y En Comú Podem, y la oposición de ERC, PP y Vox.
Las dos principales novedades serán la bajada del Impuesto de Bienes Inmuebles, ya que se pagará de media un 4,54% menos que en 2024, y la creación de una nueva tasa para la recogida de residuos, siguiendo el ordenamiento europeo.
Hasta ahora, el servicio de recogida de residuos se pagaba en Viladecans con el conjunto de impuestos recaudados por el Ayuntamiento, pero en 2025 la ley obligará a tener una tasa específica que cubra todo su coste. El resto de los 32 tributos y precios públicos existentes se mantendrán congelados excepto la tasa del cementerio, que subirá el coste del IPC.
Al igual que el IBI, la tasa de recogida de residuos estará ligada al valor catastral, por lo tanto, se fijará por tramos, de manera que el 70% de los hogares pagarán menos de 120 euros anuales (las tarifas irán de los 78 al 199 euros).
La nueva tasa mantendrá el espíritu de una fiscalidad que protege a las personas más desfavorecidas y, así, las rentas bajas pagarán un 40% menos.
También, el uso de la Municipalidad Municipal comportará hasta un 10% de descuento y el compostaje casero de materia orgánica, hasta un 20%.
Asimismo, tendrán una bonificación los negocios de alimentación y restauración que colaboren con entidades sociales para evitar el desperdicio alimentario.
Nuevo contrato de recogida de residuos
En 2025, el servicio de recogida de residuos incrementará los recursos debido al nuevo contrato terminado de estrenar.
Éste va incorporando mejoras hasta 2030 en la limpieza de los barrios y en un cambio del formato de recogida que facilite alcanzar al 65% de reciclaje marcado por la Unión Europea para el año 2035 (casi el doble de lo que se recicla ahora en Viladecans).
La nueva tasa de residuos abre el camino para que, en el futuro, quien menos genere y más recicle pueda ver compensado económicamente su compromiso.
El Ayuntamiento estudiará cómo bonificar la tasa en el futuro en este sentido.
El nuevo contrato irá incorporando cambios en el modelo para potenciar el reciclaje y medidas como la recogida puerta a puerta de algunas fracciones se harán un lugar en Viladecans y, por tanto, la posibilidad de medir y bonificar el compromiso ciudadano.
Además, generar menos residuos, y en especial los del contenedor gris, rebajan los costes de tratamiento que debe asumir la ciudad y, en consecuencia, tienen potencial para reducir la tasa.
Viladecans, además tiene como Misión de Ciudad para 2030 convertirse en neutra en emisiones de carbono y una eficiente gestión de los residuos contribuye a este objetivo, necesario para la salud y el futuro de las personas ante la situación de emergencia climática.
Las ordenanzas fiscales para 2025 también tienen otras novedades.
El Ayuntamiento de Viladecans también incorporará los gastos del mantenimiento del alcantarillado dentro del recibo del agua, como ya hacen otras ciudades.
El importe irá en función del consumo de agua de cada inmueble.
Para el año 2025, las ordenanzas también permitirán que los vehículos de renting, una modalidad que va creciendo en el mercado, se puedan censar de forma especial en el municipio.
Así, podrán disfrutar de los beneficios como residentes en cuanto a las zonas de estacionamiento regulado, como el uso gratuito de la zona verde así como de determinadas horas en la zona azul y verde.