Una cincuentena de personas convocadas por la ultraderecha, Vox y la organización juvenil Revuelta, se han concentrado el miércoles al mediodía ante la comandancia de la Guardia Civil de Travessera de Gràcia, en Barcelona, para recordar a los agentes fallecidos en Barbate (Cádiz), embestidos por una narcolancha. Los asistentes han hecho un minuto de silencio, han rezado a un padre nuestro y después el diputado de Vox, Joan Garriga, ha entregado un ramo de rosas blancas a los agentes que custodiaban la comisaría. Los agentes han agradecido el gesto de las dos organizaciones de extrema derecha aceptando las ofrendas y han conversado brevemente. Garriga ha aprovechado para cargar contra las instituciones catalanas “para dar la espalda” al no “homenajear” a los difuntos del instituto armado.
Garriga ha vuelto a lamentar que el pasado martes la Junta de Portavoces no apoyara la propuesta de su grupo para hacer una declaración institucional de condena de este asunto, ni que se guardase un minuto de silencio. Concretamente, el partido de extrema derecha ha vuelto a apuntar contra el PSC: “Es un auténtico escándalo”. Aunque si los socialistas hubieran estado a favor, tampoco habrían tenido la mayoría suficiente.
Llamamiento a la juventud a que no consuman drogas
El diputado de ultraderecha también ha pedido más recursos para la Guardia Civil. Un hilo que ha seguido la portavoz de Revuelta, Elsa Almenda, que leyendo un manifiesto ha reclamando “la necesidad urgente de hacer frente a y equiparar adecuadamente a quienes nos protegen“.
Desde Revuelta han continuado subrayando que el narcotráfico es una “amenaza” para la sociedad. Por ello, ha hecho un llamamiento a la juventud a que no consuman drogas. “Que tomen conciencia del mal que las drogas infligen a nuestras vidas y a nuestra sociedad. El consumo recreativo puede parecer inofensivo, pero alimenta una industria criminal que se nutre de la adicción y la desesperación”, ha afirmado.