martes, 8 de octubre de 2024
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Terrassa derriba dos fincas en desuso para hacer un nuevo edificio de 18 viviendas

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Los trabajos previos a la demolición de los inmuebles situados en la calle de Sant Pere 23-25 de Terrassa ya hace días que son visibles con la cobertura de una red protectora.
La demolición de estos edificios permitirá el cambio total de la fisonomía de este eje central de la manzana peatonal, con una nueva urbanización, ampliación de la vialidad y zona residencial.

El Ayuntamiento de Terrassa ha concedido la licencia de obras para la construcción de un edificio plurifamiliar de 18 viviendas.
Previamente, se derribará las dos fincas en desuso y que permitirá ejecutar el proyecto de urbanización previsto para esta zona.

La finca de la calle de Sant Pere, 25, tiene una altura máxima de planta baja+3, con fachada de 10 metros y una superficie construida de 1.360 m².
Mientras que la de Sant Pere, 23, es un inmueble de planta baja+2, con patio interior y fachada de 5 m, y una superficie construida de 728 m².
El ámbito de esta modificación puntual, que comprende una finca registral formada por estas dos edificaciones, es de 949 m².

El Polígono de Actuación PA-CSP023 prevé que, en este punto de los inmuebles, se abra el nuevo vial peatonal que conectará la calle de Sant Pere con el Pasaje de Tete Montoliu, y que contribuirá a mejorar la red viaria y la conectividad con los equipamientos que hay alrededor del pasaje de Tete Montoliu, como el Teatro Alegría, la Nova Jazz Cava, la plaza del Ayuntamiento, la plaza Didó, el Instituto del Teatro, la Sala Muncunill, o el propio edificio del Ayuntamiento.

El proyecto de urbanización contempla pavimentar viales y urbanizar los espacios públicos; colocar el nuevo mobiliario urbano; plantar arbolado; instalar nuevas redes para el servicio de saneamiento, de abastecimiento de aguas, de alumbrado público, de electricidad (baja tensión) y una nueva red de riego.

La superficie donde se actuará es de 293 m², de los cuales 87 m² corresponden a zonas verdes (parterres, arbolado y muro vegetal) que contribuirán a naturalizar este espacio urbano.
El desnivel que habrá entre la calle de Sant Pere y el pasaje de Tete Montoliu se resolverá con la construcción de una escalera y un ascensor, que formará parte del proyecto de edificación.

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