El distrito 3 de Sabadell cuenta con un nuevo espacio verde a disposición de los vecinos y vecinas. El ámbito del Parque del Norte ubicado entre las calles de Coronas y Claveles abre hoy a la ciudadanía y pone al alcance nuevas zonas de paseo y estancia, así como espacios para el juego infantil y para la práctica deportiva.
Durante la configuración de este nuevo pulmón verde, se han plantado 500 nuevos árboles que se han sumado a los existentes. En la urbanización y arreglo de esta zona, se han invertido unos 2,5 M€, cofinanciados por los fondos europeos FEDER (EDUSI).
Paralelamente el Ayuntamiento continúa trabajando para hacer realidad una nueva fase de trabajos, que permitirán reforzar la vegetación en diferentes puntos ya urbanizados del Parque entre la plaza de la Primavera y la calle de Els Clavells y urbanizar todo un nuevo ámbito entre la calle de Els Clavells y la rotonda que conecta con la carretera de Castellar. Entre las actuaciones de esta nueva fase, se arreglará el espacio de aparcamiento cerca del pasaje de Guanta, con una cincuentena de plazas, dando así respuesta a una demanda vecinal.
Qué se ha hecho en el Parque del Norte
La primera fase del Parque, que ha permitido configurar un nuevo espacio verde entre las calle de Corones y Claveles, ha supuesto reperfilar la topografía, definir las bases de laminación del agua y configurar los caminos.
Además de la plantación de 500 árboles y múltiples actuaciones vinculadas a la jardinería, se han colocado 54 bancos y sillas, 12 mesas de picnic, un gran juego infantil, 4 mesas de ping-pong, 3 canastas de baloncesto y detrás del Pabellón, donde también se han realizado actuaciones de obra civil, se han ubicado 4 pistas de petanca. El proyecto ha incluido una nueva área de perros y nuevas instalaciones de riego y alumbrado.
Un pulmón verde para la ciudad
El Parque del Norte será uno de los corredores verdes más importantes de Sabadell, con una superficie aproximada de 76.000 m² entre la calle de Corones y la rotonda. Con el Parque se recupera el corredor ecológico del antiguo torrente del Capellà, con una zona verde pensada para que sea permeable, de manera que las aguas superficiales tengan un proceso de infiltración natural.
Este efecto se consigue reduciendo al mínimo las superficies pavimentadas y acumulando las aguas de la lluvia en pequeñas balsas de laminación conectadas a la ciudad. Esta operación está pensada para que contribuya también a la mejora de la biodiversidad local.