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Hasta el 31 de mayo, Sabadell que tiene el tabaco para la salud individual y colectiva y también por se adhiere a la conmemoración de la Semana Sin Humo con el objetivo de sensibilizar a la población sobre los efectos nocivos en el planeta. Para la edición de este año, bajo el lema “Cero emisiones también en tus pulmones”, se han organizado talleres para niños y habrá puntos informativos en diferentes espacios.
A lo largo de esta semana, uns 300 alumnos de primaria participarán en talleres donde se les conciencia sobre las problemáticas asociadas al tabaco. Concretamente, participarán estudiantes de los centros educativos Agnès Armengol, Amadeu Vives, Can Llong, Joan Montllor, Juan Ramón Jiménez, Sallarès i Pla, Virolet y SIS Concòrdia. Estas actividades, organizadas desde el Ayuntamiento, tendrán lugar en los propios centros educativos y en las bibliotecas de Poniente y de la Sierra.
Por otro lado, de lunes a viernes habrá un punto informativo sobre este tema en el interior del Centro de Atención Primaria de Can Rull y también se instalará otro el jueves día 30 por la tarde, en la plaza del CAP de Sant Oleguer y el viernes 31 por la mañana, en la plaza de la Infancia.
El tabaco es la primera causa de pérdida de salud y de mortalidad prematura evitable. Dejar de fumar mejora de una manera significativa la salud de la persona fumadora y la de su entorno, independientemente de la edad o de sus antecedentes. Cabe recordar que los equipos de atención primaria de la ciudad orientan y acompañan el proceso de deshabituación tabáquica durante todo el año.
El Día Mundial Sin Tabaco se celebra cada 31 de mayo y está promovido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) desde 1988.
Entornos sin humo
En Sabadell buena parte de los equipamientos frecuentados por niños y adolescentes se han adherido a los Entornos sin humo y señalizan los espacios exteriores en los que se ha acordado no fumar. Es el caso de centros cívicos, centros educativos o bibliotecas, entre otros. De esta manera se reducen las probabilidades de que las personas fumadoras se conviertan en un modelo para los niños a la vez que se reduce la exposición al humo de estos colectivos, especialmente vulnerables al tabaco.
