La pasión por la Fórmula 1 se hace notar con fuerza estos días en la ‘fan zone’ instalada en la plaza de Cataluña de Barcelona. Cuando falta una semana para el Gran Premio en el Circuito de Cataluña –del 21 al 23 de junio-, la capital catalana calienta motores con un ‘village’ muy completo con paradas de gastronomía, música en vivo, simuladores de última generación, varios monoplazas con los que fotografiarse y tiendas donde comprar merchandising de la F1.
“Estoy flipando. Tenía muchas ganas de ver un coche en vivo y este Red Bull de 2017 es una locura. Las ruedas son gigantes, eso no se ve desde la tele”, dijo. ha explicado en Mario Barba, de 13 años y un gran aficionado venido de Sant Boi de Llobregat acompañado por los padres y su hermano Daniel.