Los Mossos d’Esquadra han puesto en marcha desde principios de julio una campaña de inspecciones a establecimientos de viviendas de uso turísticos por toda Cataluña, que prevé mantener durante los meses de verano. Según ha informado la policía en un comunicado, en la primera semana de julio ha realizado un total de 158 inspecciones y ha levantado un total de 92 actas de infracción. La gran mayoría han sido por falta de licencia de actividad, la omisión de las comunicaciones a la policía o incumplimientos enmarcados en la ley del Turismo, como no disponer del rótulo informativo de teléfono 24 horas de atención a los clientes o no tener la placa identificativa en el exterior del alojamiento.
En el caso de la ciudad de Barcelona, las inspecciones las han llevado a cabo de la mano del Ayuntamiento y se han dirigido mayoritariamente a establecimientos denunciados por los propietarios de pisos o que habían recibido reiteradas quejas de vecinos.
Según explican los Mossos, en estas inspecciones en la capital catalana se han encontrado casos como un inquilino que se hace pasar por un ejecutivo de una empresa o alguien con recursos para pagar un alquiler de larga duración, y posteriormente reluce el piso como vivienda de uso turístico. También se han encontrado con el caso de un inquilino que realiza obras sin autorización del propietario para obtener el máximo posible de habitaciones e alquilarlas por días.
Los Mossos consideran que hay una “creciente picaresca” con las viviendas turísticas como nueva fuente de negocio, pero también desde la “vertiente delincuencial de mafias” que relucen pisos como vivienda turística falsificante documentación. Además, remarcan que en muchos casos hacen obras sin autorización y destacan la conflictividad que generan en las comunidades de vecinos.
El operativo también quiere combatir el incumplimiento normativo y reforzar el conocimiento de la ley sobre la obligación de registro y comunicación a la Dirección General de la Policía de las personas que se alojan en los establecimientos de hospedaje en Cataluña. Los Mossos constatan un “alto nivel de incumplimiento” de no hacer las comunicaciones de las personas alojadas en la policía.
