Mataró ha descolgado hoy las campanas de la Basílica de Santa María para restaurarlas y recuperar su toque tradicional. Tal y como han anunciado los Campaneros del municipio, el objetivo es que por las Santas puedan volver a sonar. Es la primera vez que se retiran después de la Guerra Civil. “Es la actuación más importante sobre el campanario desde el siglo pasado”, ha dicho el director del Museo-Archivo de Santa María, Nicolau Guanyabens. Con este cambio, se pretende acercar las campanas a la gente y recuperar el patrimonio popular.
Sólo una de las campanas se cambiará íntegramente: la ‘Carme’. De hecho, el pasado 2017 dejó de sonar porque se detectó una grieta. Las otras cuatro campanas, que se han descolgado gracias a una grúa durante esta mañana, se restaurarán y se volverán a colgar durante los próximos meses. Concretamente, se sustituirán los elementos de sujeción y contrapeso actuales, de hierro, por unos de madera, como los que existían antiguamente.

La tradición de los campaneros
La escena ha llamado la atención de decenas de ciudadanos de Mataró, que se han acercado a la Plaza Santa María para apreciar este momento histórico. Y el grupo de campaneros del municipio también han estado presentes. De hecho, el trabajo de estos voluntarios ha sido crucial para poder recuperar el toque tradicional y poder llevar a cabo esta reforma. Deberán ’empezar de cero’, tal y como han comentado, ya que con las nuevas campanas se podrán llevar a cabo los repiques que ya existían, tal y como demuestran algunos escritos del año 1927.
Gracias a esta rehabilitación las cuatro campanas que se restaurarán – Miquela, Montserrat, Juliana y Semproniana – estarán más cerca de la ciudadanía. Así lo ha detallado director del Museo-Archivo de Santa María. “La gente las podrá cotejar y hatérselas suyas”, ha remarcado. Una vez renovadas, se volverán a incorporar al campanario de la Basílica para que vuelvan a sonar como lo hacían hace un siglo y durante la fecha más especial para Mataró: las fiestas de las Santas.