La Policía Nacional, con Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria, la Guarda Finanza italiana y la Europol han desarticulado una de las mayores redes estatales de venta de billetes falsos de 10 y 20 euros a través de mensajería instantánea. En la operación se han detenido a cuatro personas, tres en Barcelona y una en Jaén. En estas dos ciudades se han desarticulado dos imprentas de billetes falsos, donde empleaban papel y tinta especial que importaban desde China. La red tenía un círculo de compradores y distribuidores de moneda falsa por toda España y había comenzado a operar a nivel internacional con envíos a Portugal, Francia e Italia.
La investigación comenzó a principios de año cuando se tuvo conocimiento de la existencia de falsificaciones de billetes de 10 y 20 euros. Los agentes detectaron que se trataba de una falsificación hecha en España y que se había extendido por todo el territorio estatal, por lo que sospecharon que se podría estar comercializando a través de Internet.
Tras detectarse estas falsificaciones, se arrestaron a dos jóvenes en la zona de Levante con una importante cantidad de billetes falsos. Estos manifestaron que los habían conseguido a través de una plataforma de mensajería instantánea.
Los investigadores detectaron el canal de la red social a través de la cual se ofrecía la moneda falsa, comprobando que el administrador era una persona que ya había sido arrestada por hechos similares. El joven había creado un importante entramado de cuentas bancarias a través de una plataforma de pago en línea, donde recibía los pagos de los paquetes de billetes falsos.
Los agentes detectaron que además de dedicarse a la producción y venta de billetes falsos, proporcionaba el contacto en Italia para aquellos que querían comprar billetes falsos de otro valor, como de 50 y 100 euros.
Por otro lado, ponía a disposición de determinadas personas la información sobre el método para fabricar billetes falsos. Los que adquirían esta información debían abonar al detenido un porcentaje de las ganancias obtenidas por la venta de cada billete.
Tras interceptarse varios envíos por parte de los agentes, se comprobó que gran parte del material utilizado para hacer las falsificaciones se había adquirido en China. Por ello, el Servicio de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria colaboró en la investigación y localizó un pedido de 2.000 folios especiales de fabricación de billetes. Estos contaban con un hilo de seguridad visible a contraluz y fibras luminescentes visibles con luz ultravioleta, así como tinta de impresora que debía llegar a uno de los investigados.
Durante la investigación se detectó que el canal a través del cual ofrecían la moneda falsa era cada vez más activo y que los pedidos aumentaban cada vez más. Según los investigadores, podrían haber introducido en el circuito financiero más de 3.600 piezas entre billetes de 10 y de 20 falsos, sumando una cantidad superior a los 60.000 euros. Las personas que adquirían esta moneda falsa la ponían en circulación mediante la técnica del ‘goteo’, en diferentes puntos del estado.
Una vez comprobado el papel de todos los investigados, se llevaron a cabo cinco allanamientos en los principales domicilios de los investigados: tres en Barcelona y dos en Jaén. En estos se intervinieron 67 billetes falsos de 50 euros, folios con billetes de 10 y 20 sin terminar de procesar, 10 impresoras, teléfonos móviles, material informático, dispositivos de almacenamiento, herramientas para cortar papel, cartuchos de tinta, pinturas especiales y laca.
Los arrestados pasaron a disposición judicial y, uno de ellos, a disposición de la fiscalía de menores y posteriormente se decretó el ingreso en prisión de dos de ellos.
La investigación continúa abierta y no se descartan nuevas detenciones.