Hace años que Martorell protagoniza titulares por culpa de su polémica política de empadronamiento, al negarse a aceptar las peticiones de algunos vecinos. En 2022 el alcalde del municipio, Xavier Campllong, dejó clara su postura en una entrevista en Radio Martorell: “Aquí no empadronamos okupas”, declaró. Ahora, un grupo de vecinos afectados por esta política ha decidido denunciar estas prácticas del consistorio, centrándose en la afectación que puede tener sobre los derechos fundamentales el hecho de no estar empadronado en el municipio de residencia, tal y como ha avanzado Nació Digital.
Los denunciantes son 6 representantes de 5 familias diferentes, la mayoría de las cuales se encuentran en situación de empleo desde hace años. Al no ser ningún documento que pruebe el alquiler o la compra del domicilio donde residen, no se les acepta el empadronamiento. Lo mismo ocurre con las personas en situación de calle. Esto trae como consecuencia no poder pedir ayudas que reclamen demostrar el padrón, no poder votar en el municipio o no tener tarjeta sanitaria. En este último caso, se hace una excepción con respecto a los menores de edad, que pueden acceder al CAP y a la escuela sin necesidad de estar empadronados.
Los problemas a la hora de empadronar a ciertas personas no surgen sólo en Martorell, sino que últimamente se han hecho notar en varios municipios, como Ripoll, Canyelles, Fogars de La Selva, Martorell o Premià de Mar, tal y como mostró el síndic de greuges en un estudio sobre la situación en 2023.