El congreso Vértice se ha convertido en el epicentro de una nueva visión para la construcción y la rehabilitación sostenible. Durante los días 16 y 17 de octubre, el edificio Cúbic de Viladecans acogió la segunda edición del Vértice, unas jornadas de encuentro entre profesionales, empresas y representantes de las administraciones en busca de soluciones innovadoras para hacer frente a los grandes desafíos climáticos y energéticos. El congreso ha sido un espacio de reflexión y acción en torno a cómo construir un futuro más ecológico, saludable y accesible para todos, enmarcado dentro de los principios de la Nueva Bauhaus Europea.
La alcaldesa Olga Morales inauguró la jornada recordando que el sector de la construcción es muy importante para la ciudad y debe ser uno de los motores económicos locales, ya que “un alto porcentaje de la población está directamente vinculada”. Viladecans es la sede de la empresa Roca Group y de otras empresas que “deben ser líderes e innovadoras en un sector que debe alinearse con las necesidades ambientales y sociales del presente”. “Apostar para la construcción sostenible –dijo– es reafirmar el compromiso de la ciudad con la lucha contra el cambio climático“.
Durante los dos días más de 27 empresas, empresas emergentes (startups) y entidades expusieron sus innovaciones. Los asistentes pudieron conocer de primera mano tecnologías avanzadas en eficiencia energética, movilidad eléctrica y almacenamiento sostenible, en manos de empresas como Verdtical, One Fusta, Factor Energía o My Interactive Plant, entre otras. El eurodiputado Marcos Ros participó en el encuentro donde subrayó el papel de ciudades como Viladecans en la descarbonización del entorno construido y en la implementación de los principios de la Nueva Bauhaus Europea: “Necesitamos más municipios como Viladecans que se sumen a esta iniciativa que combina la sostenibilidad, la belleza y la inclusión para hacer frente a desafíos globales”.
Más de una veintena de expertos compartieron sus visiones sobre cómo conseguir que las ciudades sean neutras en emisiones para el año 2030. Las conferencias y las mesas redondas se centraron en temas tan cruciales como la salud en relación con los entornos construidos. Montserrat Bosch, profesora y experta en sostenibilidad en la edificación, que abordó como “la rehabilitación de edificios no sólo contribuye a la eficiencia energética, sino también al bienestar humano”.
Sostenibilidad, estética e inclusividad
El debate sobre la Nueva Bauhaus Europea fue uno de los puntos más aclamados. La nueva escuela propone un enfoque innovador que integra sostenibilidad, belleza e integración a la transformación de espacios urbanos y rurales en entornos más verdes, accesibles y humanos.
Elisa Pozo, coordinadora del Observatorio 2030, desgranó los tres valores fundamentales que sustentan esta iniciativa: sostenibilidad, estética e inclusividad. Enfatizó que la transformación de nuestros espacios no debe centrarse únicamente en la funcionalidad, sino en crear entornos que sean bellos y accesibles para todos. Este enfoque holístico “busca no solo regenerar los barrios y construir edificios sostenibles, sino también fomentar la colaboración entre sectores como la arquitectura, el arte, la ciencia y la tecnología”.
Entre los desafíos, Enric Serra, director del Área de Planificación Territorial del Ayuntamiento de Viladecans, destacó la necesidad de “simplificar la burocracia para acelerar la adopción de soluciones sostenibles” y la importancia de involucrar a los ciudadanos en estos procesos. Tal y como señaló Montserrat Bosch: “no sólo se trata de imponer nuevas tecnologías, sino de integrar a las personas que convivirán con estos cambios, haciendo de la tecnología una herramienta para mejorar sus vidas”.
El evento también incluyó una hackaton donde profesionales y personas innovadoras unieron fuerzas para crear propuestas que podrían transformar la construcción en un ámbito más sostenible. Este tipo de iniciativas subraya la importancia de la colaboración y la creatividad como motores del cambio.