Cal Músic acoge el segundo refugio bioclimático de Mollet

La actuación en Cal Músic ha incluido la plantación en la escuela de vegetación autóctona mediante técnicas de bioingeniería (fascinas y vallas vivas, aparte de plantación convencional), con especies que favorecen la polución y la cobertura vegetal de sombra. Además, se ha creado un punto de abastecimiento de barro para las aves, principalmente oréganos, y un punto de agua donde la fauna pueda beber y bañarse y donde determinadas especies puedan vivir. Sin embargo, se han instalado cajas nido para aves y murciélagos y hoteles de insectos, rocalla y madera muerta para favorecer determinadas especies de reptiles, invertebrados y otra fauna salvaje beneficiosa.

Aparte de la función de refugio bioclimático, el nuevo espacio contribuye a la naturalización y mejora de los espacios y entornos escolares, en este caso de la escuela Cal Músic. La actuación se complementa con talleres de formación para profesorado y alumnado para la incorporación al proyecto pedagógico del centro.

Condiciones de los refugios bioclimáticos

Los refugios bioclimáticos son espacios que cumplen la función de mejorar el confort térmico de manera natural, con superficies permeables y espacios de sombra. Se aplican soluciones basadas en la naturaleza, como árboles, pérgolas con enredaderas y con zonas de arbustos, céspedes y prados.

Deben cumplir con unos parámetros mínimos, como disponer de un espacio para la ciudadanía, asientos para el descanso, buena accesibilidad y señalización explicativa correspondiente. Opcionalmente, pueden disponer de personal de apoyo que atienda a los usuarios en caso de encontrarse mal o de sistemas de alarma para la petición de ayuda.

Además, deben cumplir con unos requisitos técnicos, como disponer de una superficie de verde urbano superior a 0,5 hectáreas, diversidad de vegetación con floración y fructificación en diferentes épocas del año y espacios naturales o artificiales para la nidificación de aves o murciélagos. Es recomendable, además, que incorporen elementos de agua que contribuyan a refrescar el ambiente, como fuentes con tuberas difusoras y juegos y superficies de agua.

Aparte de los habilitados y señalizados como tales en las escuelas Cal Músic y Joan Salvat Papasseit, también tienen la consideración de refugios bioclimáticos los parques de la Plana Lledó, Pinetons y Les Pruneres.