El Ayuntamiento de Barcelona habilita entre el 7 y el 17 de enero 226 puntos de recogida de árboles de Navidad en los diez distritos de la ciudad. El objetivo es evitar abandonos incívicos en el espacio público y al mismo tiempo aprovechar un recurso natural para mejorar el mantenimiento de los parques y jardines.
Los servicios de recogida de residuos se ocuparán de retirar periódicamente los árboles y ramas, que se entregarán limpios de elementos ornamentales. Después, el personal de Parques y Jardines los triturará y los dejará madurar para convertirlos en acolchado. El año pasado se recogieron un total de 10.273 árboles de Navidad en la ciudad, que son transportados para su reciclaje al vivero municipal.
El acolchado, formado por los residuos vegetales triturados, es un elemento de jardinería que permite mejorar la retención de humedad y la aireación del suelo, y al mismo tiempo ayuda a evitar la aparición de malas hierbas.
El proceso para hacerlo acolchado requiere de dos o tres meses de tratamiento para obtener una buena calidad. De los más de 10.000 árboles del año pasado se pudo hacer 195 m3 de triturado. El material resultante se repartirá en los espacios verdes de la ciudad a lo largo del primer semestre del año.
