Después de dos años y medio de obras, el Tranvía ha comenzado a hacer pruebas – la llamada marcha en blanco – entre Glòries y Verdaguer. No será hasta el próximo 9 de noviembre cuando los pasajeros puedan empezar a hacer uso del servicio. De momento, los convoyes de la línea T4 – que hoy ha modificado el servicio precisamente por este motivo – han empezado a circular en el recorrido entero, haciendo las paradas reglamentarias y calculando el trayecto, así como testeando que no haya ningún error. Es decir, el objetivo de esta marcha en blanco es ajustar todos los parámetros, como por ejemplo los semáforos o las nuevas estaciones.
Así lo ha explicado esta mañana en unas declaraciones a medios el director general de la Autoridad del Transporte Metropolitano (ATM), Manuel Valdés. Estas pruebas también servirán para adaptar algunos convoyes al nuevo sistema de raíles, ya que entre Glòries y Verdaguer no utilizarán la catenaria tradicional. Según Valdés, los de la ‘línea T4 se han adaptado pero lo tendrán que hacer todos’. Además, está previsto que a finales de año lleguen tres trenes más.
La primera teniente de alcaldía, Laia Bonet, ha ‘celebrado’ que ya se pueda ‘anunciar la fecha oficial’ de la entrada en funcionamiento del enlace entre Glòries y Verdaguer. Bonet ha dicho que se trata ‘de un proyecto que define cómo se debe transformar la ciudad para ponerla al servicio de la movilidad sostenible’. “Es esta la forma de movernos la que queremos en Barcelona”, ha mencionado. En total, serán 2 km de alargamiento de la red tranviaria, que también supondrá la conexión de la capital catalana con Sant Adrià y Badalona. Además, Bonet también ha remarcado que a partir del 9 de noviembre el tranvía ‘entrará en la trama urbana del Eixample’. Finalmente, la primera teniente de alcaldía ha cifrado en 24.000 los usuarios nuevos que harán uso de esta nueva conexión.
2 años y medio de obras
La conexión entre Glòries y Verdaguer – que ha supuesto una inversión de 120 M euros – está a punto de hacerse realidad después de dos años y medio de obras y algunos tropiezos. Aparte de habilitar todo el sistema necesario para que el tranvía pueda circular, durante este tiempo este tramo de la Diagonal también ha cambiado su forma. Según Bonet, esta ‘transformación’ ha supuesto la incorporación de un nuevo carril bici, la ampliación de las aceras para ‘favorecer la movilidad a pie’, más verde y la dignificación del espacio. Además, también ha destacado que este ‘nuevo espacio amable’ también ‘favorecerá el comercio y la actividad económica de la zona’.
Futuro incierto con la conexión total
Lo que todavía es una incógnita es saber cuándo se hará efectiva la conexión total de la Diagonal. Es decir, el enlace de la red tranviaria hasta Francesc Macià, que supondrá una transformación total de la Diagonal. Para que esto se haga realidad, es necesario que primero el Ayuntamiento, así como la Generalitat de Cataluña, dispongan de los presupuestos aprobados. “Sin recursos no podemos seguir hablando de calendarios”, ha dicho Laia Bonet. En todo caso, ha asegurado que la voluntad del Ayuntamiento es atajarlo. De hecho, hace unos meses el Ayuntamiento puso ésta como única condición, y que si así fuera, las obras podrían comenzar en el verano de 2025.
En todo caso, el director general de ATM ha explicado que el proyecto ejecutivo se ha ido trabajando en paralelo a medida que avanzaban las obras entre Glòries y Verdaguer. No obstante, el siguiente paso será la licitación, siempre que ‘haya colaboración entre las administraciones’. En total, Valdés ha hablado de unos 40 meses de obras para que el Tranvía atraviese toda la Diagonal. Esto supondría la conexión de las líneas T4, T5 y T6 con las T1, T2 y T3, que conectan Barcelona con municipios como Esplugues o Cornellà.