La exposición de referencia mundial sobre el Titanic con 200 objetos recuperados del naufragio abrirá puertas el próximo 15 de abril en el Espai Inmersa de Barcelona. 'Titanic – The Official exhibition' llega por primera vez a la capital catalana con una exposición para adentrarse en la historia de uno de los transatlánticos más famosos del mundo. La propuesta incluye una sala inmersiva y meticulosas recreaciones de los espacios más emblemáticos del barco. Además, el recorrido tendrá una espectacular experiencia de realidad virtual en formato de metavers que permitirá viajar al fondo del mar. Este lunes se ha abierto la lista de espera para adquirir las primeras entradas. En los próximos días se pondrán a la venta los tickets para el público general.
La muestra transporta a los visitantes en abril de 1912, momento en que el Titanic inició su primer y trágico viaje. A través de la reconstrucción de cabinas, espacios emblemáticos del barco y una selección cuidadosa de objetos personales, la muestra reconstruye las historias humanas de valentía, amor, esperanza y pérdida que marcaron aquel viaje inolvidable.
Los visitantes recibirán una tarjeta de embarque con la identidad de un pasajero real y podrán seguir su recorrido a lo largo de la exposición. "Esta experiencia emocional y educativa también reivindica los esfuerzos contemporáneos para conservar el yacimiento submarino del lugar del hundimiento del Titanic y preservar su memoria para las futuras generaciones", han destacado desde la organización.
Aparte de los artefactos y espacios recreados, la exposición contará con una película inmersiva que permite revivir en primera persona las últimas horas del Titanic, transportando a los espectadores al dramático desenlace de la travesía.
La organización ha explicado que entre los objetos recuperados del naufragio está la farola de cabecera del palo de proa (Forward Masthead Light), un telégrafo del barco, una botella de champán con líquido conservado del siglo XIX, unas cartas de póquer, un anillo de filigrana con diamantes, unos binóculos de la marca francesa Lemaire, una bolsa de malla de plata para vestidos de noche,una tetera de plata utilizada en el restaurante 'À la Carte' de primera clase, una chaqueta con patrón "Prince of Wales", un logómetro o partituras musicales.