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La ciudad de Barcelona es un lugar de visita de los turistas que están de ruta estos días de Semana Santa. Los rincones más turísticos de la capital catalana este sábado se han llenado de viajeros como el Paseo de Gracia, con dos de los icónicos edificios de Antoni Gaudí: la Casa Batlló y la Pedrera. Precisamente, la arquitectura de Gaudí es uno de los grandes reclamos para atraer el turismo, que proviene, la mayoría de Europa, pero también de Latinoamérica, Estados Unidos y Asia. El Gremio de Hoteles de Barcelona calcula que en esta época festiva la ocupación de camas superará el 80% y comercios del centro de la ciudad, como chocolates Simón Coll, muy concurrido estos días por la Pascua, apuntan un incremento progresivo de usuarios.
Los viajeros llegan a Barcelona por diferentes motivos, ya sea para conocerla o como la Vania, que viene de Bulgaria, porque su hija “quiere estudiar aquí y aprovechamos para hacer visitar” la ciudad durante tres días, especialmente la obra de Gaudí. Lo mismo que en Mehdi y Yali, que viven en Francia y admiran al arquitecto catalán. Han estado en Madrid por trabajo y antes de volver a casa han hecho un paro en Barcelona: “Hemos estado en la Sagrada Familia, ahora en la Casa Batlló. Por la tarde iremos a hacer el recorrido tradicional, al Park Güell” y esperan, si les queda tiempo, al final del día. “un paseo por la playa”.
También se ha detenido durante tres días en la capital catalana Sandra Menigochi, procedente de Argentina. Está viajando en familia por el estado español para “celebrar los 88 años” de su madre. Han aterrizado en Barcelona desde Madrid, se han desplazado por el sur de España y ahora voltearán por la ciudad que les ha acogido “muy bien”.
Barcelona ha sido punto de unión de un grupo de amigos de diferentes lugares que no se veía desde hacía más de 15 años. Alexis Ruiz, un cubano que vive en Miami, ha venido con la familia para reencontrarse con dos amigas y dice que “la gente es muy calurosa y muy amable”. Es la primera vez que visita Cataluña y ha aprovechado que cruzaba el océano el Atlántico: “Vamos a empezar por Francia, a unos cuantos lugares, también hemos estado en Toledo, ahora en Barcelona”. El itinerario que sigue pasa por Valencia y Madrid y entonces volverá hacia Estados Unidos.
Unos turistas que llegan a Cataluña a las puertas de la celebración de Lunes de Pascua y la responsable de tiendas Simón Coll en Barcelona, Carme Cardo, diferencia el perfil de cliente del establecimiento junto a la Casa Milà, que es “más turístico”, el del local de calle Mallorca con Rambla Catalunya, que “es más local”. Cardo apunta que “poco a poco” se nota el aumento de personas y de visitas al negocio.
Ocupación hotelera ligeramente inferior
El director general del Gremio de Hoteles de Barcelona, Manel Casals, estima a la ACN que la ocupación de camas se sitúe aproximadamente en torno al 85%, “ligeramente inferior” a otros años y lo atribuye al adelanto en el calendario de la Semana Santa. Casals señala que cuando este periodo se ha situado en abril, la media ha sido de un 87%. Este 85% es un porcentaje parecido a los cálculos de los alquileres de los apartamentos turísticos, con unos niveles “muy similares” los de 2023, apreciaba el presidente de Apartur, Enric Alcántara, hace unos días en la ACN, y precisaba que la mayoría de reservas son de familias del sur de Europa y la media de estancia es de unos cinco días.
El gran grueso de estos viajeros han llegado a la capital catalana en avión, el aeropuerto de El Prat esta Semana Santa tiene programadas 9.703 operaciones, una cincuentena más que hace un año, y prácticamente un 10% se han concentrado en Viernes Santo.
