Lo que parecía una tarde normal para los bañistas de una playa de Gran Canaria, se vio alterada cuando unos bañistas vieron un taurino de aproximadamente dos metros. Ante la alerta, los socorristas actuaron rápidamente llamando a la Policía Local, la cual procedió al cierre inmediato de la playa como medida de precaución y la bandera roja izaron buena parte de la tarde.
Según las primeras informaciones, podría tratarse de un taurino martillo, una especie común en estas aguas. Este taurino, aunque impresionante por su tamaño, ya que puede llegar hasta los cinco metros de longitud. Además, es conocido por ser inofensivo para los humanos.
La presencia de taurinos en Canarias no es extraño. No es la primera vez que sucede un hecho de estas características en la zona. El año pasado varias playas tuvieron que cerrar por la presencia de taurinos.