Lo que iba a ser un fin de semana de festividad y alegría en Guillena, un pueblo de unos 10.000 habitantes en Sevilla, acabó en tragedia este domingo, cuando un terrible incendio acabó con la vida de cuatro miembros de una familia.
José, Antonia y sus dos hijos, José Antonio y Adrián, perdieron la vida en el siniestro que, según las primeras investigaciones de la Guardia Civil, podría haber sido provocado por la sobrecarga de la batería de un patinete eléctrico.
El incendio, que tuvo lugar alrededor de las 7:40 de la mañana, consumió rápidamente la vivienda familiar situada en la calle Fernando Martín.
Las llamas y el humo intenso atraparon a la familia en el piso superior de la casa, donde las rejas en las ventanas y una puerta cerrada con llave les impidieron escapar.
Las estructuras de madera dentro de la casa, como la barandilla de la escalera, favorecieron la propagación del fuego.
Los cuatro miembros de la familia fueron encontrados sin vida, tres de ellos completamente carbonizados.
Aunque se intentó reanimar a uno de los difuntos, no pudieron hacer nada por salvarle la vida.
El único superviviente del incendio fue el perro de la familia, que se encontraba en un patio exterior y fue rescatado por un vecino.