La Policía Nacional está investigando el falso entierro de una mujer de unos 90 años que murió hace unos días en Palma (Mallorca). Según el medio Crónica Balear, una familiar de la difunta se puso ayer por la tarde en contacto con el SAMU 061 para solicitar el certificado de defunción.
Cuando personas ancianas mueren en su casa, tiene que venir un médico a comprobar la muerte de la persona y entonces -si todo es normal- emite un certificado de defunción.
Pero cuando los técnicos del 061 preguntaron a la mujer por el domicilio donde se encontraba la difunta, ésta les explicó que ja la habían enterrado en una finca entre Estellencs y Banyalbufar, tal y como era su deseo.
Sorprendidos ante las palabras de la mujer, le comunicaron que no podían emitir un certificado de defunción si no veían el cadáver, pero ella insistía, muy soberbio, que lo quería en ese momento.
También le indicaron que no debería haber movido un cadáver por su cuenta para enterrarlo en una finca si un médico no había comprobado antes el estado de la víctima. Es por ello que desde el 061 se pusieron en contacto con la Guardia Civil, aunque finalmente se hizo cargo de la investigación la Policía Nacional.
SOBRINA HOMICIDA?
Con el avance de la investigación, la mujer que hacía la llamada -que era sobrina de la finada-, una mujer española de 51 años, fue detenida como presunta autora del homicidio de su tía.
Finalmente el cadáver de la nonagenaria no lo habían enterrado en la finca de la Serra de Tramuntana, sino que fue encontrado en su domicilio. El cadáver presentaba heridas de etiología violenta y es por ello que su sobrina fue acusada de homicidio.