Unas 600.000 gallinas han muerto en un incendio de tres naves de la granja avícola del Grupo Rujamar, en San Lorenzo de la Parrilla (Cuenca), una cuarta parte de todos los animales que tenía esta macrogranja.
El presidente ejecutivo de Rujamar, Rubén Martínez, ha explicado en declaraciones a los medios de comunicación que el incendio se originó ayer hacia la una del mediodía en la nave central de las tres que finalmente han quedado calcinadas por las llamas.
Las tres naves afectadas son las más modernas de la compañía, erigidas en 2017, 2019 y 2020, con una vida útil estimada en unos treinta años.
Martínez ha estimado que en estas tres naves había entre 550.000 y 600.000 gallinas, todas en tierra, ya que se ha declarado un firme defensor del bienestar animal, y ha precisado que han muerto por inhalación de humo, de una manera “muy rápida y muy cruel”.
También ha destacado que los diez trabajadores de las tres naves han podido salir por su propio pie detectar el incendio y solo uno ha sufrido heridas porque al salir de la nave o nera se ha dado un golpe.
Además, ha lamentado que el incendio se ha propagado con rapidez, y ha detallado: “Tenemos todo un sistema de vías de seguridad y no ha habido tiempo ni en conectar la manguera ni nada porque se ha propagado el incendio superrápido. En una hora ya estaban incendiándose las 3 naves y en menos de 3 horas, todo calcinado”.
También ha afirmado que, de momento, no se saben las causas que han podido originar el incendio y ha precisado que todo el perímetro de las naves, que son las más modernas y están dotadas con las últimas tecnologías, está «súpercontrolado y súper limpio».
El presidente ejecutivo de Rujamar ha querido lanzar un mensaje de tranquilidad a sus clientes, ya que ha señalado que aunque han muerto unas 600.000 gallinas, la empresa cuenta con dos millones más, por lo que ha afirmado que se mantendrá la cadena de suministro, para que no falten huevos a sus principales clientes.
Asimismo, también ha valorado que se han puesto en contacto «muchísimos compañeros» del sector para ofrecerle huevos y «colaboración de todo tipo».
Martínez ha valorado, asimismo, la «rápida respuesta de los servicios de emergencia, tanto de la Guardia Civil como de los bomberos» y ha afirmado que, si bien en estos momentos no hay riesgo de que las llamas se propaguen a otras instalaciones, aún quedan ocho bomberos con tres dotaciones, para impedir que se vean afectados el centro de clasificación, las oficinas, el almacén de cartonaje y otras naves de puesta.