Esta pasada madrugada del sábado se desencadenó un dramático suceso en un bar, en el que el alcohol y la violencia provocaron un brutal tiroteo con la policía.
Un hombre de 61 años entró en un bar de la calle Villalpando de Zamora hacia la 1:40 h, pidiendo una copa. Uno de los camareros le explicó que no podría servirle, porque el establecimiento ya estaba cerrado al público. Poco después de iniciar una discusión por este motivo, el hombre, claramente ebrio, sacó una pistola que llevaba encima y disparó al camarero.
Vecinos y testigos advirtieron rápidamente la situación, encontrando al camarero herido de un disparo en el bar y que el agresor había huido. Una vez alertada la Policía Municipal y Nacional de los hechos, siguieron la pista al tirador. Éste había llegado hasta las vías del tren, donde se escondió bajo un puente.
Cuando los agentes descubrieron el escondite del hombre, les empezó a disparar a ellos también. El hombre tendría experiencia en tiro deportivo y, en esos momentos, las autoridades no tuvieron otro remedio que abrir fuego contra él. Finalmente, lo abatieron.
Después de los acontecimientos, el hombre fue atendido por un equipo sanitario y trasladado al Hospital Virgen de la Concha en estado grave. El camarero herido, por su parte, fue trasladado a un centro hospitalario de Salamanca, para ser operado de los impactos de bala.
