España formará parte del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas en los próximos tres años. La Asamblea General de la ONU ha votado este miércoles a favor de su candidatura para ocupar una de las tres vacantes reservadas para los países occidentales en este órgano encargado de adoptar resoluciones para expresar la posición de la comunidad internacional respecto de vulneraciones de derechos humanos y de autorizar misiones de investigación. Las otras dos vacantes serán ocupadas por Islandia y Suiza.
También se han renovado 15 vacantes para el resto de regiones y una de ellas ha acabado en manos de Qatar, a pesar de las denuncias de ONG por las vulneraciones de derechos humanos en este país. En cambio, ha caído la candidatura de Arabia Saudita.
Human Rights Watch acusa a Riad de matar a “centenares de refugiados etíopes” y de cometer “crímenes contra la humanidad” en la guerra del Yemen. También Amnistía Internacional denuncia la discriminación legal hacia las mujeres y las “detenciones arbitrarias” de defensores de los derechos humanos en este país. Con todo, las entidades de derechos humanos también cuestionaban las candidaturas de Qatar, Tailandia y Etiopía, que también han conseguido una silla en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
La Asamblea General de la ONU también ha dado luz verde a las candidaturas de Chipre, las Islas Marshall y la República de Corea para el grupo de países de Asia-pacífico; Benín, la República Democrática del Congo, Gambia y Kenia para los países africanos; la República Checa y Macedonia del Norte para el este de Europa; Bolivia, Colombia y México para América Latina y el Caribe.