Un trágico accidente en el Eje Pirenaico (N-260a), a la altura de Biescas (Huesca), ha dejado este lunes un muerto y siete personas heridas, todas ellas miembros de una misma familia. El siniestro se ha producido sobre las 14.15 h en el punto kilométrico 508, en uno de los tramos más transitados y complejos de la carretera pirenaica, especialmente durante estas fechas.
Según ha informado la Guardia Civil, el accidente se ha originado cuando uno de los vehículos familiares ha colisionado frontal-lateralmente con un turismo que circulaba en sentido contrario. Instantes después, el segundo coche de la familia, procedentes de Vizcaya, ha chocado por alcance con el primero, agravando el impacto y las consecuencias humanas.
El conductor del vehículo que encabezaba la comitiva familiar, un hombre de 38 años, ha fallecido en el lugar de los hechos. En el mismo coche también han resultado heridos otro hombre de 38 años, dos mujeres de 34 y 66 años y un bebé de 12 meses.
En el segundo vehículo familiar han quedado heridos el conductor, de 47 años, y dos menores de edad. El motorista del otro turismo implicado también ha sufrido lesiones, aunque menos graves.
Todos los heridos han sido trasladados en ambulancia hasta el Hospital de Jaca, excepto la mujer de 66 años, que ha sido evacuada en helicóptero del 112 hasta el Hospital Miguel Servet de Zaragoza a causa de la gravedad de sus lesiones.
La N-260a ha quedado totalmente cortada al tráfico hasta pasadas las 17.00 h, lo que ha obligado a establecer desvíos por vías alternativas y ha provocado importantes colas en este corredor pirenaico, especialmente complicado en plena operación del puente de la Purísima.
Los equipos de emergencias investigan ahora las causas exactas del siniestro en una carretera que a menudo registra incidentes graves por su orografía e intensidad de tráfico.