Cuatro jóvenes de entre 20 y 21 años han muerto tras salirse de la carretera con el coche en el que viajaban y caer por una ladera de más de 200 metros. Al llegar los servicios de emergencia, no han podido hacer nada para salvarles la vida.
Los hechos ocurrieron el sábado por la noche, hacia las 22:00 h en la carretera CA-643 a la altura de Soba, en Cantabria, en el puerto de Lunada. Un grupo de 8 amigos de Madrid acudían a pasar dos días con unos amigos en una cabaña, pero cuando circulaban por la carretera con dos vehículos diferentes, uno de ellos salió de la carretera y cayó 300 metros abajo por la ladera de la montaña, llegando a dar varias vueltas de campana hasta que se quedó parado por la nieve.
Hasta el lugar se trasladaron efectivos de los bomberos, la Guardia Civil de Tráfico, personal de mantenimiento de carreteras y sanitarios del 061, pero el rescate de los jóvenes se alargó hasta las 06:00 h del día siguiente porque el vehículo había caído en una zona de difícil acceso. Al llegar a los jóvenes, ya no se pudo hacer nada para salvarles la vida.
La principal hipótesis sobre el accidente es que el vehículo podría haber resbalado por la nieve y el hielo que cubrían el asfalto en el momento de los hechos. De hecho, el alcalde de la localidad, Julián Fuentecilla, explica al 'Diario Montañés' que la carretera debería cortarse al tráfico cuando nieva, porque se vuelve un punto muy peligroso para la conducción.
Se da la circunstancia de que la cabaña donde tenían que pasar el fin de semana ya no estaba muy lejos del lugar del accidente. Las cuatro víctimas mortales son dos chicos y dos chicas, todos ellos entre 20 y 21 años. Una alerta automática del teléfono de uno de los ocupantes alertó a los servicios de emergencia.
Según el citado medio, la carretera donde ha ocurrido el accidente no tiene guardarraíles en la zona y durante el sábado se encontraba en aviso rojo de la DGT por las condiciones meteorológicas. Este aviso obligaba a los conductores a llevar cadenas o neumáticos de invierno.
