Una familia con dos hijos de 6 años y 4 meses han terminado en la calle después de ser desahuciados por la propietaria del piso donde vivían. La familia, en la que tanto el padre como la madre se han quedado sin trabajo, no podían pagar el alquiler y habían pedido ayuda al Ayuntamiento de Alicante y la Generalitat Valenciana, pero no lograron aplazar la situación.
El matrimonio había conseguido hacer incluso un informe donde se mostraba que estaban en una situación de extrema vulnerabilidad, un documento que debería haberles proporcionado ayuda por parte de los organismos públicos. Lo único que han conseguido son 10 días en una pensión, ya que tanto el Ayuntamiento como la Generalitat dicen que no tienen pisos disponibles para estos casos.
"Me dicen que no hay viviendas, que los que hay son para reformarlos. Ni ofreciéndome a reformarlos yo misma, nos han dicho siempre que no", explica Helena, la madre de familia, a los medios de comunicación.
Ahora, el mayor temor de Helena es que esta situación conlleve a que los servicios sociales tomen a sus hijos y que incluso puedan perder la custodia. Han pedido al Ayuntamiento de Alicante que les ayude a buscar una solución para evitar que esto suceda y han pedido también a sindicatos como Carolinas, que critican que los políticos "no están cumpliendo con la ley que ellos mismos habían propuesto".
Al parecer, la propietaria del piso donde vivían ha explicado que tenía que echar a la familia porque necesitaba cobrar los 400 euros mensuales que pide. Según detalla, necesita el dinero para mantener a su propio hijo y pagar la hipoteca.
La mujer asegura que, como mínimo, sus inquilinos "cobran un subsidio", pero que ella no tiene "ni para comer" y que necesita seguir cobrando un alquiler.
