La Guardia Civil ha detenido a un imán que ejercía de profesor de árabe en una mezquita de Madrid. Se trata de un hombre de 44 años que aprovechaba su posición como docente para radicalizar a los menores a quienes daba clase, y captar posibles candidatos para Daesh.
En la actuación se han practicado dos registros domiciliarios en los que se han confiscado elementos informáticos para analizarlos posteriormente. El detenido ha sido puesto a disposición judicial y el juez de la Audiencia Nacional ha decretado su prisión provisional.
La investigación comenzó el año pasado después de detectar a una persona en Madrid vinculada al ideario yihadista que realizaba tareas de adoctrinamiento a menores.
Estas actividades no pasaron desapercibidas en el seno de la comunidad donde se realizaban, y generaron un conflicto que provocó que el investigado se viera obligado a abandonar la mezquita, y continuar con estas en entornos de más privacidad.
VISIÓN VIOLENTA DEL ISLAM
El detenido defendía ante los menores una visión violenta de la religión en los mismos términos que las principales organizaciones terroristas yihadistas.
En sus discursos exaltaba la figura del terrorista suicida como una figura legítima en la lucha contra los judíos, los cristianos y los apóstatas. Estas teorías eran expuestas en las clases que el detenido impartía a los menores como ejemplo de la conducta a seguir por todos los musulmanes.
Actualmente, la captación terrorista de jóvenes es uno de los fenómenos emergentes a nivel global en el ámbito del yihadismo, un hecho detectado en otras investigaciones recientes de Guardia Civil como una tendencia preocupante a la que hacer frente.
El trabajo desarrollado por los investigadores de la Guardia Civil, junto con la participación activa de analistas de la agencia Europol, ha permitido reunir el conjunto de indicios y evidencias de la presunta actividad terrorista del detenido.
Desde la elevación al nivel 4 de Alerta Antiterrorista el 26 de junio de 2015 pasado, la Guardia Civil ha potenciado todas las investigaciones en el ámbito de la radicalización y el adoctrinamiento, que claramente suponen un apoyo a las estructuras de las organizaciones terroristas.
La operación ha sido desarrollada por el Servicio de Información de la Guardia Civil y es dirigida por el Juzgado Central de Instrucción número 2 y la Fiscalía de la Audiencia Nacional.