La Guardia Civil ha detenido a un joven de 27 años, conocido por sus antecedentes policiales, como presunto autor de dos delitos contra la seguridad del tráfico, por conducir un vehículo de motor con pérdida total de puntos y por conducción temeraria, así como presunto autor de un delito de atentado contra los agentes de la autoridad y un delito de desobediencia grave, después de supuestamente intentar atropellar a un guardia civil al huir.
Ocurrió en la localidad cordobesa de El Carpio, y el arrestado es vecino de este municipio. Según ha informado la Benemérita, los agentes observaron durante un servicio un turismo que resultó sospechoso al circular por la autovía A-4 vertiendo sobre la calzada gran cantidad de combustible, con el peligro consiguiente, por lo que los guardias civiles decidieron interceptarlo e identificar a su ocupante.
Después de detener el vehículo y proceder a la identificación del conductor, este huyó, intentando atropellar a uno de los agentes que conformaban el dispositivo, procediendo los guardias civiles a su seguimiento mientras el sospechoso realizaba una conducción manifiestamente temeraria.
Con un claro peligro para la integridad física del resto de usuarios de la vía, se inició una persecución hasta que los agentes pudieron interceptar el vehículo, si bien el conductor se bajó con intención de huir a pie, desobedeciendo constantemente las órdenes de los agentes, que lograron inmovilizarlo y detenerlo.
Tras un registro del vehículo, localizaron en el interior del maletero cinco garrafas llenas con 100 litros de gasóleo, que fue intervenido para determinar su procedencia, al tiempo que comprobaron que el detenido no tenía permiso de conducir, dado que lo tenía retirado por pérdida total de puntos. El detenido y las diligencias instruidas han sido puestas a disposición de la autoridad judicial.