El Congreso de los Diputados ha rechazado este martes, por 57 votos a favor, 169 en contra y 118 abstenciones, la toma en consideración de una iniciativa legislativa popular (ILP) que proponía retirar a las corridas de toros la condición de patrimonio cultural. El texto pretendía derogar la ley 18/2013 de regulación de la tauromaquia —aprobada durante el gobierno de Mariano Rajoy— y modificar la ley de 2015 sobre patrimonio cultural inmaterial para excluir las fiestas taurinas.
El PP y Vox han votado en contra, mientras que Sumar, ERC, Junts, PNV y Bildu lo han hecho a favor. El PSOE se ha abstenido, hecho que ha impedido que la iniciativa prosperara.
Los promotores de la ILP sostenían que la protección legal actual “no responde a una identificación cultural general” y que la tauromaquia es “una excepción dentro de la legislación de protección de los animales”. Por ello, consideraban “no pertinente” mantenerla como patrimonio cultural común.
Desde Junts, la diputada Pilar Calvo ha recordado que el Parlament de Catalunya prohibió las corridas de toros en 2010, denunciando que el Tribunal Constitucional anuló la decisión en 2016 “gracias al blindaje jurídico” impulsado por el PP. ERC, por voz de Etna Estrems, ha defendido que la propuesta “no impone nada” y que “devuelve el derecho de decisión a cada territorio”.
Por parte del PSOE, la diputada Maribel García ha reivindicado la necesidad de “más diálogo” y de respetar “la convivencia y la diversidad cultural”. “La cultura no se impone ni se deroga por decreto”, ha subrayado.
Los impulsores de la ILP, que recogió más de 700.000 firmas, han expresado su decepción por la abstención socialista. Según Aïda Gascón, “el PSOE ha dado la espalda a la ciudadanía para no incomodar a sus sectores más conservadores”. Otras promotoras, como Cristina Ibáñez y Marta Esteban, han calificado el resultado de “día triste para la democracia” y han acusado al partido de “falta de valentía política”.