Cuatro hombres han sido detenidos por drogar y violar a dos chicas menores tuteladas por la Generalitat Valenciana. Los detenidos las tuvieron retenidas diez días en una casa okupada, obligándolas a mantener relaciones sexuales con ellos y con otros hombres.
La madre de una de las chicas ayudó a liberarlas: fue en una estación de Gandia ella quedó con uno de sus captores. Se hizo pasar por otra menor y este picó el anzuelo e intentó captarla.
Una vez concertada la cita, la madre avisó a la Guardia Civil y esto ayudó a detener a este hombre y a localizar la casa okupa, también en Gandia, donde tenían retenidas a las jóvenes de 14 y de 16 años.
"Ya se hizo la búsqueda y se les enseñó fotos a las menores de las personas que habían abusado de ellas. Porque ya le digo, fueron varias personas, una habla de hasta diez y quince personas", explica Francisco Garrido, investigador de la Guardia Civil.
El problema, según la Guardia Civil, es que las drogaban, porque todo lo que recuerdan es difuso. A medida que las localizaron, las trasladaron a un hospital de Gandia para determinar las lesiones que tenían.
Las víctimas huyeron de dos centros de menores a finales de junio. Los detenidos las captaron ofreciéndoles refugio, todo tipo de regalos y drogas. Las tuvieron retenidas en la casa durante diez días.