¿Cuáles han sido las primeras impresiones después de la jornada de ayer?
Sentimos una enorme satisfacción. Estamos muy agradecidos a la gente que nos ha votado y a todos los que han trabajado y han hecho posible que esto pase. La ciudad quiere un cambio y se ha demostrado muy claramente. Estamos trabajando para que este cambio sea una realidad.
¿Se lo esperaban?
Entraba dentro de nuestras expectativas. Hace tiempo que ERC está muy cerca de ser la fuerza más votada. Durante el último acto que hicimos en la Rambla el hilo conductor era transmitir a la gente que esto lo teníamos al alcance y prácticamente ha sido así, y se ha producido un empate técnico.
¿Cuál es el siguiente paso?
El siguiente paso es que algunos partidos con una clara visión republicana han dicho que quieren llevar a cabo aquello que la ciudadanía pide, que no es otra cosa que un cambio muy profundo. Lo hemos dicho todos muchas veces, en debates, en artículos, en tertulias, y ahora que tenemos esta oportunidad toca ponernos de acuerdo y hacer posible esta necesidad.
¿Nos podría hablar de los posibles pactos?
Nosotros en estas elecciones íbamos muy claramente fijados en el cambio y Ballesteros sólo hablaba de banderas. Insisto, lo que la calle pedía era cambio. Ha habido cuatro partidos, Junts per Tarragona, En Comú, CUP y ERC, que de manera muy clara cada vez que hemos tenido la oportunidad hemos enmendado que queremos un cambio, un cambio de modelo y de personas y ahora tenemos la oportunidad de hacerlo. La ciudadanía nos ha ofrecido la posibilidad de sumar juntos y nuestra responsabilidad es llevar a cabo aquello con lo que nos habíamos comprometido.
Han tenido buenos resultados en la Part Alta, en el Eixample y en los Barrios Marítimos.
Hemos subido en todos los barrios de manera notoria. Hemos crecido en todas partes. En algunos hemos ganado de manera clara y en otros hemos subido. Por ejemplo, en Campclar, que históricamente no es un barrio de ERC, hemos subido de un tres a un once, casi hemos multiplicado por cuatro. En Sant Salvador hemos pasado del siete al diecisiete, con esto quiero decir que hemos subido muchísimo en todos los barrios. Me gustaría destacar que cuando se habla de a quién representa cada uno nosotros representamos a la lista más diversa de Tarragona. La lista que representa a la perfección cómo es Tarragona y su complejidad. Esto de los barrios cada vez deja de ser más un tópico y hemos hecho llegar a la gente que nos importa muchísimo y la ciudadanía lo nota.
¿Cree que el tema del proceso ha sido clave de estos resultados?
Nosotros hemos planteado toda la campaña sin mencionar este tema. Es evidente que hemos hecho un gran esfuerzo y mucho trabajo durante estos cuatro años y consideramos que el testimonio de nuestros líderes muestra cómo somos los miembros del partido. El hecho de tener una persona como Oriol Junqueras en la prisión, que cada vez que abre la boca capta la atención de todo el mundo por la generosidad de su discurso y su amplitud de miras y su visión de futuro, evidentemente nos ayuda. Pero no hemos enfocado la campaña a hablar de esto, al contrario, quien ha hablado de banderas y de forma despectiva ha sido Ballesteros.
¿Contemplan un reparto en la alcaldía entre el PSC y ustedes?
No tiene ningún sentido. Esta ciudad quiere un cambio, no le importa el futuro profesional de Ballesteros. Que él sea alcalde más o menos tiempo, que lo sea de una manera u otra, que lo sea a trozos, a semanas o a meses, a la gente no le preocupa. La gente lo que quiere es cambiar, pasar página de una época, y ahora se trata de hacer esto de una manera muy respetuosa.
Si finalmente asume la alcaldía, ¿qué es lo primero que hará por la ciudad?
Lo primero que haremos es el pacto de alcaldía. Después lo más importante, hacer de Tarragona una ciudad con valores, honesta, transparente y participativa. Parecen cosas muy ridículas pero son muy reales y tienen que ver con la vida cotidiana. Este cambio de paradigma tiene mucho que ver con que la ciudadanía se corresponsabilice con la gestión de la ciudad y con que el Ayuntamiento sea lo suficientemente eficiente como para poder canalizar todas estas cuestiones. Haremos a los ciudadanos partícipes de este cambio y estoy segurísimo de que lo aceptarán muy gustosamente.
Para poder gobernar, aparte de los partidos independentistas necesitarían el apoyo de En Comú. ¿Son positivos en este tema?
Esto aún está por coser. Aquí hay una cosa muy clara y es que todos hemos expresado de una manera muy evidente qué es lo que queremos. Todos hemos hablado de participación, de consejo de distritos, de cohesionar la ciudad, de hacer de la cultura el gran motor de la ciudad. Somos partidos muy diferentes pero tenemos tantas ganas de cambio que confiamos en que podamos llegar a un acuerdo y así gobernemos.