Este domingo por la tarde está siendo especialmente complicado en la red viaria catalana debido a varios accidentes que han provocado importantes retenciones en diferentes puntos del territorio. El Servicio Catalán de Tráfico informa de que la situación afecta principalmente a vías como la AP-7, la C-58, la C-55 y la A-7, entre otras.
En la AP-7, un accidente a la altura de Barberà del Vallès en sentido sur ha obligado a cortar dos carriles, generando colas de como mínimo 4 kilómetros desde Santa Perpètua de Mogoda. En esta misma vía, pero en Vilafranca del Penedès y en sentido Barcelona, otro siniestro ya ha sido retirado, pero las retenciones continúan debido al efecto tapón.
En la C-58, un accidente de entrada a Barcelona, muy cerca del Nudo de la Trinidad, ha obligado a cortar un carril y ha provocado 3 kilómetros de cola desde Montcada i Reixac. Este atasco también está teniendo repercusión sobre la C-33, agravando los tiempos de desplazamiento en esta zona metropolitana.
En cuanto a la A-7, a la altura de Tarragona, un accidente en sentido sur ha dejado un carril cortado y hay hasta 2 kilómetros de cola. En la C-55, las complicaciones se concentran entre Manresa y Benifallet, así como en Castellbell i el Vilar en dirección sur, donde se registran retenciones notables.
Tráfico también ha informado de que la C-12 ha sido cortada en Flix en ambos sentidos a causa de un accidente, aunque la situación ya ha sido resuelta. Otro accidente destacado ha tenido lugar en el kilómetro 19 de la GI-682, en Tossa de Mar, que también ha generado complicaciones temporales en la zona.
Con estas incidencias, se recomienda a los conductores que consulten el estado del tráfico antes de iniciar desplazamientos y, si es posible, que eviten las zonas más afectadas.