El Sindicato de Inquilinos ha convocado una manifestación el 23 de noviembre en Barcelona para exigir la rebaja de los precios del alquiler, a la mitad, y alertar de que si eso no ocurre el destino será la “huelga de alquileres”. “Si los rendistas y los responsables políticos no bajan los precios, lo haremos nosotros”, ha dicho el movimiento.
La convocatoria sigue el camino de la marcha que se hizo el pasado domingo en Madrid, que creen que ha marcado un “punto de inflexión” en la lucha por el derecho a la vivienda. El Sindicato ha criticado las medidas “descafeinadas” o las regulaciones “defectuosas” que han impulsado los políticos. En este sentido, ha considerado una “farsa” las medidas anunciadas por el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, este lunes.
El portavoz del Sindicato, Enric Aragonès, ha valorado que las ayudas anunciadas “acabarán en el bolsillo de los rendistas”, y ha puesto sobre la mesa que la manifestación en Madrid es el punto de partida de una “ola imparable” para dejar claro “que esto se ha acabado”.
El Sindicato ha criticado que los precios han crecido “sin justificación” y ha lamentado que mientras un grupo reducido de personas se ha estado “haciendo de oro” con esta situación, los inquilinos se han empobrecido cada vez más. También ha acusado a los responsables políticos de “proteger los intereses de los rendistas”.
“Se ha acabado la paciencia”, ha asegurado el sindicato, que ha alertado de que si se llega a la huelga y los inquilinos dejan de pagar los alquiler, “les cae el negocio”.
