Al acercarse la festividad de Sant Jordi, una de las tradiciones más esperadas por los catalanes es la compra del pan de Sant Jordi, un producto artesanal que representa los colores de la Senyera. Este año, el Forn Bertran de Badalona se ha alzado como el ganador del prestigioso concurso organizado por la asociación Panàtics, convirtiéndose en el establecimiento con el mejor pan de Sant Jordi de 2025.
El Forn Bertran, situado en el centro de Badalona, ha destacado por la calidad y la artesanía de su pan, elaborado según una receta tradicional creada en 1989. La combinación de tres masas –queso emmental, sobrasada y nueces– ofrece una propuesta deliciosa que representa los colores de la Senyera catalana, haciendo que este pan sea tanto distintivo como emblemático.
Los responsables de esta deliciosa creación son Andrés Jarque y Alberto Piedra Martínez, que continúan la tradición del Forn Bertran, abierto hace más de treinta años y que ya cuenta con la cuarta generación al frente. A este galardón subraya el compromiso del establecimiento con la artesanía panadera y la calidad del producto, en una competición que ha contado con un jurado profesional que ha valorado aspectos como el aspecto exterior, la forma, el dibujo de las barras de la Senyera, la calidad de los ingredientes y la textura.
El premio al mejor pan de Sant Jordi también ofrece una oportunidad especial para los ganadores, ya que tendrán el honor de llevar su producto al presidente de la Generalitat durante la tradicional ofrenda del 23 de abril.
El segundo puesto se va hacia las Tierras del Ebro
El segundo clasificado de este año en el concurso del mejor pan de Sant Jordi es la Pastelería Larrosa, situada en Flix. Esta pastelería, que es conocida por su dedicación artesanal, ha conseguido una destacada segunda posición en una competencia muy disputada, consolidándose como una referencia de calidad en la elaboración de este producto emblemático de la festividad de Sant Jordi.
El pan de Sant Jordi de la pastelería, con una textura suave y un sabor equilibrado, se ha distinguido por el uso de productos de primera calidad, manteniendo una estética que respeta los colores de la Senyera catalana.
Este 2025, pese a no conseguir el primer puesto, han mostrado una vez más su capacidad de competir con los mejores panaderos del país y han recibido el reconocimiento del jurado por su trabajo bien hecho.
