Los catalanes que se consideran creyentes son el 46,9%, la cifra más baja de todo el Estado. En el resto de España, los datos también confirman una tendencia sostenida: el 39% de las personas se declaran ateas, agnósticas o indiferentes, cifra que se ha estabilizado tras años de crecimiento, reduciéndose 2,5 puntos con relación al año anterior. Madrid y Euskadi tienen entre un 44 y un 47% de no creyentes. En cambio, Ceuta, Melilla, Extremadura y Castilla-La Mancha mantienen índices de religiosidad por encima del 67%.
La decimocuarta edición del estudio ‘Laicidad en cifras’ de la Fundación Ferrer i Guàrdia muestra el mantenimiento del relevo generacional en las opciones de conciencia. Las personas jóvenes de entre 18 y 34 años se declaran mayoritariamente no religiosas. El grupo más mayoritario es el de las chicas entre 18 y 24 años, mientras que el grupo de 35 a 44 años presenta un leve repunte de la religiosidad respecto al año anterior. Las mujeres continúan mostrando una mayor religiosidad que los hombres, especialmente en el grupo de personas católicas practicantes.
El matrimonio civil y los nacimientos fuera del matrimonio se consolidan
Los datos reflejan un descenso generalizado de los ritos de paso religiosos y una desvinculación progresiva de la práctica religiosa, incluso entre las personas que se declaran católicas: 7 de cada 10 no son practicantes.
La mayoría de los matrimonios en España son civiles (82,3%), una tendencia aún más marcada en Cataluña, donde llegan al 90,5%, la tercera comunidad con menos proporción de matrimonios religiosos. Los nacimientos fuera del matrimonio se mantienen en un 50%, consolidando una tendencia iniciada hace décadas.
Educación: crece la alternativa laica
El número de estudiantes españoles que cursan religión continúa disminuyendo y se sitúa en 2.940.793, pero el profesorado asignado a esta materia ha aumentado hasta los 36.686 docentes. Paralelamente, crece el alumnado que opta por actividades alternativas a la religión: un 42,6% en primaria, un 45,9% en la ESO y un 66,4% en el bachillerato. Esta tendencia es especialmente clara en Cataluña, el País Vasco y las Islas Baleares, donde la mayoría de estudiantes no cursan religión. De hecho, en Cataluña en el curso 2020-2021 el 61% de los alumnos de primaria y el 60,5% de ESO cursaron actividades alternativas a la religión. En el Bachillerato fueron el 87,4%.
Actualmente, España cuenta con 2.548 centros educativos católicos, de los que un 94,6% son concertados y, por tanto, reciben financiación pública parcial. Los centros católicos representan el 9% del total de centros educativos del estado, con una presencia especialmente significativa en Cantabria, La Rioja, Castilla y León, Euskadi y las Islas Baleares. En Cataluña el 17,5% de los alumnos del curso 2021-2022 iban a centros confesionales. Las escuelas concertadas católicas representan el 8,4% del total de escuelas catalanas, algo por debajo de la media española del 9%. Prácticamente todos los centros católicos son concertados.
Nueva cifra récord de financiación pública a la Iglesia
La asignación tributaria a la Iglesia católica ha alcanzado un máximo histórico de 297,7 millones de euros, aunque sólo un 10,4% de los contribuyentes marca exclusivamente su casilla en la declaración de la renta. Este aumento se explica, en parte, porque las personas que lo hacen suelen tener rentas altas.