La plataforma ‘Dignidad en las vías’ es una realidad. Desde hace seis meses, los usuarios de R-14, R-15, R-16 y R-17, no pueden conciliar su vida laboral y familiar a causa de Renfe.
No es solo una queja sobre un factor que falla en Renfe, es todo un ecosistema que, a estas alturas, encuentran que no funciona: desinformación de cambios en los trenes, frecuencias que no son prácticas y trenes con pocos vagones en hora punta, obligando a la gente a ir a pie derecho: “las personas, en Sant Vicenç de Calders, suben con un taburete”.
Los horarios y la frecuencia de los trenes
La puntualidad de los trenes siempre ha estado en duda, pero “desde hace cinco o seis meses, se ha vuelto intratable”, nos comenta Anna Gómez, portavoz de la plataforma Dignidad en las vías.
En horas puntas, hay una falta de trenes importante. Sin ir más lejos, para ir de Tarragona a Barcelona antes de las ocho de la mañana solo hay un tren disponible.
Trenes que no salen porque hay incidencias que nadie sabe o trenes que acaban en cierto lugar, pero que nadie ha informado de que acaba allí, mientras que en la página web salía que llevaba en el destino.
El nacimiento de la plataforma
La plataforma nace del grupo ‘República Independiente del Último Vagón’ y tiene una serie de peticiones que, básicamente, se podrían resumir en un funcionamiento eficaz de Renfe. “Queremos que los trenes cumplan los horarios, que en las horas puntas se envíe un tren largo y no un tren de tres vagones, queremos una ampliación de la frecuencia y que se nos informe“.
La desinformación es gigante en este sector. Casos de trenes que salen a la vía 8 y, de repente, con gente dentro esperando, acaban saliendo a la vía 13, pero nadie informa dentro del tren. Es gente de fuera quien tiene que informar. Ciudadanos ayudando a ciudadanos.
Dar apoyo a todos los afectados
El día 7 de abril en Tarragona, quieren leer su manifiesto, pero no quieren centrarse sólo en esta ciudad. Quieren ir a diferentes estaciones las cuales son afectadas también por estas incidencias, como pueden ser Reus, Altafulla, Torredembarra, Sant Vicenç de Calders o Vilanova i la Geltrú.
Un problema que también afecta al resto de agentes que rodean a la Renfe, porque, por ejemplo, hay convocada una huelga del servicio de informática.