Cacaolat, la marca catalana por excelencia de batidos, cambia de manos. El Idilia Foods, propietario de las marcas Colacao, Nocilla y Paladín, ha comprado el 50% de la propiedad de Cacaolat, que mantendrá el 50% restante en manos de Damm. La operación ha supuesto un coste de 50 millones de euros y permite la creación del grupo de batidos más grande de todo el Estado.
En un comunicado emitido de forma conjunta, las dos compañías han explicado algunos detalles de la operación. Cacaolat ha asegurado que, pese a la venta, el grupo continuará operando de forma independiente y que el objetivo de la operación es acelerar su crecimiento en el mercado de los batidos lácteos, tanto a nivel nacional como a nivel internacional.
De hecho, la dirección de Cacaolat todavía será la misma tras la compra, que está pendiente de la aprobación de la Comisión de los Mercados y la Competencia. El director general continuará siendo Josep Ribagorçana, mientras que la producción se mantendrá en Santa Coloma de Gramenet.
De esta manera, la marca Cacaolat pasará a formar parte de Idilia Foods con otras marcas que, hasta ahora, eran su competencia, como Colacao, Nocilla, Okey y Paladín.
Cacaolat unirá a sus marcas propias —Cacaolat, Letona y Laccao— la gestión, comercialización y distribución de los batidos de ColaCao Energy, ColaCao Shake y Okey.