Los catalanes destinan un 52,1% de su renta anual a pagar cada mes el alquiler, que se eleva a 1.680 euros de media. Se trata del segundo dato más alto del Estado, sólo superado por las Islas Baleares, donde el esfuerzo económico por los inquilinos es del 56,8%, según advierte la Asociación de Usuarios Financieros (Asufin) con datos cruzados de varias estadísticas oficiales. A continuación, se sitúan Canarias (51,3%) y Madrid (50,7%).
La media estatal se queda en el 43,5%. La entidad asegura que estos datos demuestran la “imposibilidad de alquilar en solitario” en las cuatro comunidades más tensadas porque el impacto el alquiler puede suponer el 70% del sueldo medio.
El País Vasco, pese a tener una renta media anual por hogar elevado, la segunda detrás de la Comunidad de Madrid, presenta precios de alquiler más ajustados, por lo que el esfuerzo económico baja al 38,4%.
A la inversa pasa en Canarias, con sueldos menos elevados, pero más precio del alquiler, lo que aumenta la tensión por el pago del alquiler.
Ante esta realidad, Asufin insiste en la necesidad de emprender políticas que ataquen de forma quirúrgica esta problemática, de destinar más suelo para vivienda pública de alquiler y de avanzar en los incrementos de renta.
“Las medidas de carácter generalista como la bajada de IVA suponen fuertes cargas para el Estado sin acabar de favorecer a quienes más lo necesitan”, apuntan.
