El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, y el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, han acordado incrementar la tasa turística en los cruceros que hacen escala en Barcelona y se están menos de 12 horas.
Se trata de una petición que ha hecho Collboni, que quiere eliminar el máximo de 4 euros actual a través de la ley de acompañamiento y hacer un incremento “sustancial”. El alcalde ha subrayado que ahora mismo hay 1,6 millones de pasajeros de corta estancia que pasan por la ciudad, con perspectivas de crecimiento que “no son asumibles”.
En general, Collboni ha apostado por abrir un debate “sosegado” sobre la fiscalidad turística en Cataluña, y ha defendido que pueda servir como fuente de financiación de políticas públicas, refiriéndose también a que se mantenga el decreto elaborado por el último ejecutivo para gestionar los pisos turísticos.
Con este decreto en la mano, Barcelona se propone eliminar todos los 10.000 pisos de uso turístico de la ciudad a partir de 2028.
“El presidente se ha comprometido a mantener el decreto”, ha explicado el alcalde barcelonés.
“Es evidente que Barcelona estamos en situación de emergencia habitacional”, ha comentado Collboni.
Así pues, y manteniendo este acuerdo, el gobierno de la Generalitat estudiará también la posibilidad de que Barcelona encarezca aún más la tasa turística en los cruceros de corta duración, aunque ni Ayuntamiento ni Generalitat han explicado hasta qué cantidad se plantean encarecer el recargo.