Un total de 696 mujeres se han inscrito en la última convocatoria de 300 plazas para acceder al cuerpo de Bomberos de la Generalitat. Esta cifra de inscripciones femeninas es la más alta nunca registrada, superando la convocatoria del año pasado, a la que se inscribieron 642 mujeres.
Ambas convocatorias son las primeras en las que se ha aplicado una reserva del 40% de las plazas para mujeres, que actualmente representan un 2,8% del personal. Porcentualmente, las 696 mujeres inscritas suponen un 19,53% del total de 3.563 aspirantes que optarán a una de las 300 plazas convocadas este año. En cinco años, las aspirantes femeninas se han multiplicado por tres.
Para acceder al cuerpo hay que superar las diversas fases del proceso de selección (concurso-oposición, formación y prácticas). El plazo de presentación de solicitudes para participar finalizó este lunes.
El conseller de Interior, Joan Ignasi Elena, ha asegurado que los datos “demuestran que las políticas de feminización tenían todo el sentido y dan resultados”. “Cada vez hay más mujeres que quieren ser bomberas, mozas o agentes rurales, y eso es una magnífica noticia porque nos permite avanzar hacia unos cuerpos que sea un reflejo más real de nuestra sociedad“, ha añadido.
En cuanto a la convocatoria de 2023, está ahora a punto de iniciar la fase de formación, con un 39,5% de mujeres.
Actualmente, el cuerpo de Bomberos cuenta con 74 mujeres, a las que hay que sumar las 11 bomberas que se incorporaron el otoño pasado y que actualmente están en periodo de prácticas. La incorporación de 95 nuevas bomberas una vez superada la fase de formación, por lo tanto, permitirá doblar la presencia femenina en el cuerpo.
